La situación de la seguridad en Barcelona ha irrumpido en la agenda política. Si bien los delitos que atentan contra la integridad del ciudadano siguen siendo algo inferiores a los de hace cinco años en la capital catalana, éstos han aumentado considerablemente en los últimos años. Un incremento de la inseguridad que algunos partidos han extendido a otras ciudades como Madrid, donde supuestamente el riesgo de ver tu casa ‘okupada’ fue elevado durante el mandato de Manuela Carmena.
A tenor de los datos que ofrece el Ministerio del Interior en el balance de la criminalidad en Madrid en el primer semestre de 2019, los ciudadanos tienen menor porcentaje de riesgo a sufrir un delito violento que atente sobre su integridad física ahora que en 2014 o 2015.
El balance de la legislatura de Manuela Carmena se salda con números positivos en cuanto a los delitos violentos, y número negativos en relación a hurtos, delitos y faltas, y delitos de tráfico de droga.
La alcaldesa de Ahora Madrid aterrizó en la alcaldía de una ciudad que en el primer semestre de 2015 había sufrido 5.882 robos con violencia y 3.440 robos con fuerza en domicilios. Al final de su mandato, Madrid registró 5.187 robos con violencia y 2.457 robos en domicilios.
Por el contrario, en ese mismo tiempo, los hurtos aumentaron en 7.472 casos, los delitos por tráfico de drogas en 217, y los delitos y faltas generales en casi 16.000. En cuanto a los homicidios, en los primeros seis meses de 2015 hubo cuatro por los seis que ha habido este año, cifras ‘residuales’.
Durante los años de Manuela Carmena en la alcaldía, representantes políticos de la oposición acusaron al consistorio de no actuar ante un clima de delincuencia que presuntamente se estaba extendiendo en la capital y que, a tenor de los datos oficiales, no fue del todo así.
Mientras los delitos y faltas aumentaron, la legislatura de Carmena dejó la ciudad con menos delitos violentos de los que encontró.
