Según recoge la Generalitat, Puig ha mostrado la voluntad de su ejecutivo de apoyar a las cerca de 800 empresas, la mayoría empresas familiares y pequeñas empresas, que ven afectada su solvencia al tener que asumir la bonificación del precio del carburante fijada por el Gobierno para frenar la escalada de precios de la energía.
De esta manera, ha explicado que el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) concederá créditos sin intereses “con el fin de garantizar la solvencia de las estaciones de servicio y que puedan asumir la diferencia entre el coste que les supone la compra del combustible a las petroleras y la cantidad que cobran en los puntos de venta”.
Puig ha querido mostrar “la implicación” de la Generalitat “por lograr una reducción de los precios” y ha asegurado que la comunidad “es la única autonomía que ha ofrecido a las empresas y autónomos de las estaciones de servicio una solución para afrontar este periodo transitorio”.
El jefe del ejecutivo autonómico ha calificado la rebaja del precio del combustible de “buena decisión” del Gobierno, pero al mismo tiempo ha señalado que no puede tener efectos negativos sobre el conjunto de las empresas de este sector.
En este sentido, ha instado al Ministerio de Hacienda a mantener una reunión con todos los empresarios del sector para “buscar soluciones y simplificar” el procedimiento para efectuar la devolución de los 20 céntimos por litro de carburante que deben adelantar.
