Esta cifra representa un retroceso del 30,4% con respecto al registro del mismo periodo de hace un año y una caída del 50% frente al último trimestre de 2010. Con vistas al futuro, los expertos prevén que las caídas en los próximos trimestres sean incluso mayores, ya que en 2010 fue cuando el sector revivió sus mejores tiempos del ‘boom’ con más de 150.000 casas que cambiaron de manos en cada uno de estos periodos.
En el arranque del pasado año, el incremento del IVA en el mes de julio, un impuesto que sólo se aplica a las viviendas de obra nueva, y el final de la desgravación para rentas superiores a 24.100 euros brutos anuales animaron a comprar pisos.
Sin embargo, las buenas cifras del año pasado han resultado ser un espejismo por la falta de incentivos fiscales y con dificultades para acceder a créditos hipotecarios. Con estas perspectivas, la solución que les queda a los vendedores de inmuebles es seguir bajando los precios. Según advirtió la semana pasada el Banco de España, la vivienda seguirá abaratándose hasta 2012 e, incluso, hasta principios de 2013.
Autonomías
Por autonomías y en términos absolutos, las comunidades que suelen registrar mayor número de transacciones totales, han soportado los datos más negativos con respecto al descenso de las transacciones en el parqué inmobiliario. Así, Cataluña se lleva el dato más pesimista con 4.418 compras de vivienda menos que en el primer trimestre de 2010; le siguen Madrid, Andalucía, Valencia y Castilla y León que registran 3.946, 3.787, 3.113 y 3.018 operaciones menos que en los tres primeros meses del año pasado. En relación a la nacionalidad del comprador, durante el primer trimestre de 2011, las transacciones realizadas por extranjeros residentes en España aumentaron un 3,4%, hasta las 6.876 compraventas.
Cuatro años
Según Fomento, la vivienda ha perdido un 15,4% de su valor en los últimos cuatro años. En términos reales (descontando la inflación), la caída llega al 20%, según destacó el director general del servicio de estudios del antiguo instituto emisor, José Luis Malo de Molina.
