Entre la gran banca, por el momento sólo la nacionalizada Bankia se ha desmarcado del cobro de esta comisión. CaixaBank, BBVA y Banco Santander, los tres grandes bancos españoles con permiso del nacionalizado Bankia, han decidido comenzar a cobrar una comisión de alrededor de 2 euros a los no clientes que retiren efectivo de sus respectivos cajeros automáticos, una medida que pone entre la espada y la pared a la banca online y a las entidades de tamaño mediano.
La primera que anunció el cobro de esta comisión, ya en primavera, fue CaixaBank, que cuenta también con la red de cajeros más extensa de España, con unas 9.500 máquinas. BBVA decidió seguir el ejemplo y anunció que a partir de septiembre también cobrará por estas operaciones en sus casi 6.000 cajeros, mientras que hoy mismo el Santander ha señalado que empezará a aplicar la comisión en sus 5.000 cajeros a partir del tercer o cuarto trimestre.
En total, entre los tres bancos suman unos 20.500 cajeros automáticos. La cifra representa más de un 40% de los 50.133 cajeros que había instalados en España, según las últimas cifras publicadas por el Banco de España correspondientes al primer trimestre de 2015.
De la decisión de cobrar esta comisión se ha desmarcado Bankia, el otro gran actor del sector financiero español con una red de unos 5.500 cajeros. Tal y como señaló recientemente el consejero delegado del banco rescatado, José Sevilla, la red es “bastante productiva” tras la inversión de mejoras realizada en los últimos años, por lo que “no sentimos la necesidad de cambiar la política actual”.
Algunas entidades ya han comenzado a reaccionar al movimiento estratégico de la gran banca. Es el caso de Evo Banco, que ha anunciado que devolverá a sus clientes las comisiones que les cobren otras entidades por sacar dinero en los cajeros de éstas últimas. A cambio, deberán ser titulares de una Cuenta Inteligente (principal producto de ahorro de la entidad) y el importe retirado deberá ser igual o superar los 120 euros.
