En las últimas semanas, los miembros de la cúpula directiva de varias cotizadas del parqué madrileño han salido de compras en el accionariado de sus propias compañías. Con este movimiento han aprovechado el giro bajista que la Bolsa se apunta desde finales de enero a la par que, según los expertos, buscan infundir confianza en los inversores.
El representante más claro de esta tendencia es Demetrio Carceller. El empresario e inversor ha aumentado su peso en Damm, Ebro Foods y Sacyr Vallehermoso en las últimas sesiones. En Damm, la cervecera que preside, ha ampliado su peso hasta el 0,38% del accionariado con la compra de 707.920 acciones. En la firma alimentaria, el porcentaje que controla es ya del 0,009% tras haberse hecho con 13.500 títulos de la cotizada por un importe ligeramente inferior a los 200.000 euros.
La tercera de sus participadas en las que ha aumentado cartera ha sido en Sacyr Vallehermoso. Mientras el expresidente de la constructora, Luis del Rivero, no hace más que soltar papeles al mercado, Carceller ha aprovechado para reforzar su posición de primer accionista hasta controlar un 15,9% de la cotizada, porcentaje en el que se incluye la participación de grupo Satocán, con quien tiene sindicada su participación.
La semana pasada hicieron lo propio tres altos cargos de Dia. La presidenta de la cadena de superdescuento, Ana María Llopis, aumentó en 15.261 acciones su peso en la compañía, en este caso, como pago a sus labores. Sin embargo, su segundo, Mariano Martín, y uno de los consejeros de la cotizada, Richard Golding, salieron de compras por 10.675 y 9.637 títulos respectivamente en las últimas jornadas.
El último en sumarse a este movimiento ha sido el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. El tirón bajista por el que atraviesa el Ibex 35, que tras empezar 2012 con alzas ya pierde un 5%, se ha dejado sentir también en la energética. Frente a este escenario, Galán ha decidido ampliar su peso en la compañía hasta el 0,076% a través de la compra de 120.000 acciones a un precio medio de 4,48 euros por título.
Antes que él, otros que ya habían redoblado la apuesta por sus cotizadas en las últimas sesiones habían sido José García Cantera, consejero delegado de Banesto, y José Miguel Isidro Rincón, presidente de Europac. El directivo de la entidad financiera fue el más comedido en sus compras: 466 acciones a un precio medio de 3,98 euros por acción. Con esta operación, Cantera tiene en su queda con un 0,007% del capital del grupo. Por su parte, el presidente de la papelera aumenta su peso hasta el 0,032% del accionariado tras haber adquirido 11.000 títulos entre 2,96 y 2,80 euros.
El rosario de compras en las últimas sesiones por parte de los expertos se completa con el consejero delegado de BBVA, Ángel Cano, que se hizo con 98.890 acciones de la entidad a 6,87 euros cada una hace tan solo unas sesiones. También Indra, una de las más golpeadas en las últimas semanas por la presión vendedora, su presidente, Javier Monzón de Cáceres, se ha hecho por 10,27 euros cada uno, con 1.623 títulos de la tecnológica.
Los analistas consultados por este diario esperan que las compras se perpetúen mientras el Ibex 35 se siga comportando peor que sus vecinos europeos. Los bajos precios alcanzados por algunas cotizadas invitan a sus altos cargos a apostar por ellas y, de paso, lanzar un mensaje de confianza a los mercados. En este sentido, algunos expertos no descartan notificaciones de aumentos de autocartera en las próximas sesiones en un esfuerzo de algunas compañías por frenar un traspiés bursátil que se prolonga desde mediados de febrero.
