La frontera del río Bravo es ahora en una marca candente para la inversión. Dos ETF se han convertido en el mejor indicador sobre los planes de Trump para EEUU y México. La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca ha pillado desprevenidos a muchos inversores que no quisieron contemplar la victoria del republicano hasta muy pocos días antes de la cita con las urnas. Este es el motivo por el que dos fondos cotizados que ya se conocen como ETF Trump están ahora causando furor en Wall Street.
El primero de los ETF Trump es el mayor fondo cotizado sobre acciones mexicanas cotizado en la Bolsa de Nueva York. El triunfo del candidato republicano se ha traducido en un duro castigo para el iShares MSCI Mexico Capped del que ya comienza a reponerse. Los cazadores de gangas de perfil más especulativo no han perdido la oportunidad de hacerse hueco entre sus participantes.
Desde el día 8 de noviembre en el que los estadounidenses acudieron a las urnas, el descalabro alcanzó el 18% en sus compases de mayor castigo, un descenso que se traduce en la pérdida de más de 10 dólares por cada participación del ETF con ADN mexicano, que ya se ha repuesto en un 3% desde sus mínimos del pasado viernes. Sin embargo, aún está muy lejos de igualar cotas previas al momento en el que el FBI anunció la reapertura de su investigación contra Hillary Clinton por el caso de los correos electrónicos.
La cartera de inversión de este ETF se reparte entre las grandes cotizadas del país limítrofe con EEUU: América Móvil, Femsa, Grupo Financiero Banorte, Televisa, Cemex, Walmart de México, Grupo México, Fibra Uno, Bimbo y Alfa, por citar solo las posiciones más abultadas. La relajación del discurso en políticas comerciales y migratorias hace pensar a algunos gestores que vigilar de cerca la evolución del mercado bursátil mexicano a través de este fondo podría ser una opción más que interesante para ganar con la modulación del mensaje populista del nuevo presidente.
Los gestores de carteras más duchos en la operativa de este fondo señalan que en el momento en el que las encuestas se mostraron más favorables a una victoria de Clinton llegaron grandes cantidades de capital al mismo. Así, se superó la barrera de los 1.000 millones de dólares en activos. Sin embargo, las retiradas de participantes de los últimos días, las más abultadas de los últimos tres años, especialmente de aquellos sin coberturas frente a la depreciación del peso mexicano o sin posibilidad de implementar posiciones cortas.
Muy distinta es la senda que recientemente ha recorrido el otro fondo cotizado al que se le ha colocado también el apellido Trump. En este caso, se trata del First Trust RBA American Industrial Renaissance ETF, que presente en Wall Street desde mucho antes de que el magnate anunciase su intención de relevar a Barack Obama en la Casa Blanca, se compone de una cesta de valores que en un buen número son los que paradójicamente mayor tajada podrían sacar de la aplicación de las medidas económicas domésticas en las que más ha insistido el republicano.
En este sentido, la intención de Trump de potenciar la industria y la infraestructura nacional se convierte en el gran aliado de este ETF compuesto en un 99% de acciones de compañías estadounidenses y fundamentalmente de estos dos sectores. Desde que las urnas confirmaron la victoria del empresario neoyorquino metido a político, el fondo suma un repunte del 18,7%.
Los expertos del parqué neoyorquino consultados por diversos portales financieros apuntan a dos factores fundamentales para este ascenso. El primero de ellos es el propio ascenso de las compañías de corte industrial y focalizadas en el desarrollo de infraestructuras, ante la mejoría de condiciones de negocio y desarrollo de nuevos proyectos que augura el nuevo gabinete presidencia. El segundo, la abultada entrada de dinero que se ha producido hacia este vehículo de inversión colectiva en sentido opuesto a lo que había venido ocurriendo con su contraparte mexicana.
De entre la cartera de valores que el ETF Trump estadounidense, los nombres más destacados por peso son Tutor Perini, Granite Construction, MasTec, Oshkosh, MYR Group, Emcor, TriMas Group, Primoris Services y Quanta Services. Todos ellos, valores incluidos en el índice de resurgimiento industrial americano que diseña y controla el despacho de asesoría financiera Richard Bernstein.
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