El Ibex 35, que ya ayer cerró a la baja, se dejaba a media sesión un 2,09% hasta situarse en los 10.160 puntos. Los números rojos se adueñan de las principales plazas bursátiles europeas ante las nuevas alertas sobre la economía europea que ha despertado el dato del PMI servicios alemán, un pesimismo que en España se veía intensificado por el lastre de la banca, tras la ampliación de capital de BBVA. El Ibex 35, que ya ayer cerró a la baja, se dejaba a media sesión un 2,09% hasta situarse en los 10.160 puntos.
El principal lastre del selectivo madrileño era la banca, liderada por un BBVA que retrocedía un 5,44% tras la ampliación de capital de 2.000 millones que ha llevado a cabo para alcanzar un 40% del turco Garanti. Dentro del sector, el Popular se dejaba un 4,34% y el Sabadell un 3,51%. No obstante, el mayor castigo era para Abengoa, que se desplomaba de nuevo al caer un 8,23%.
Fuera de nuestras fronteras, los descensos eran también generalizados después de que el PMI servicios alemán haya caído inesperadamente hasta los 52,1 puntos en octubre, frente de los 54,4 puntos del mes anterior. El Eurostoxx 50, principal indicador del Viejo Continente, retrocedía un 1,17% hasta situarse en 3.086 puntos. Al otro lado del Atlántico, los futuros de Wall Street apuntaban a una apertura negativa tras los retrocesos de ayer. El Dow Jones cedía un 0,4% en la preapertura, mismo descenso que registraba el Nasdaq.
En los mercados de renta fija, la prima de riesgo española subía un ligero 0,16% hasta alcanzar los 128,90 puntos. En concreto, el bono de deuda a diez años ofrecía una rentabilidad en el mercado secundario de un 2,106%, por el 0,817% que pagaba el bund germano.
En lo que respecta al resto de países de la denominada periferia europea, la prima de riesgo italiana subía hasta 148,50 puntos, por los 74,90 enteros de Irlanda. El diferencial de Portugal con Alemania era de 231,10 puntos, y el de Grecia de 744,40.
