Fabricantes como Apple o Samsung juegan en su propia liga, pero otros como Nokia y Research in Motion están apostando fuertemente por sus nuevos dispositivos con los que esperan hacerse con un buen pedazo del mercado de los smartphones.
Así las cosas, la gama de teléfonos Lumia y el próximo sistema operativo BlackBerry 10, con sus correspondientes dispositivos, se convierten en la tabla de salvación de las empresas finlandesa y canadiense.
Se trata de casos especialmente sangrantes. Por una parte se encuentra el fabricante finlandés Nokia que fue durante años el primer vendedor de teléfonos móviles, pero se ha visto relegado a un segundo plano con el auge de los smartphones (o teléfonos inteligentes) y Samsung.
El buque insignia de la compañía europea en su apuesta por el mercado de los smartphones es el Lumia 920, un teléfono de alta gama con pantalla de alta definición de 4,5 pulgadas, procesador de 1,5MHz Snapdragon y revolucionaría tecnología de fotografía Pure View. Ya ha sido presentado y aún no tiene fecha de lanzamiento, aunque se especula con que pueda llegar en Noviembre.
Se trata de un intento de Nokia, en colaboración con Windows Phone, de aumentar su presencia en el mercado de los smartphones a tiempo, ya que logrará entrar de lleno en la temporada navideña y puede aspirar a unas buenas ventas.
En el caso de Research in Motion, no es menos chocante que sea uno de los pioneros en el mundo de los smartphones tal y como los conocemos hoy, el creador de BlackBerry, el que vea caer sin freno su cuota de mercado.
Pero los terminales de RIM con BB10, en el que cifra la empresa su ‘salvación’, no verán la luz hasta principios de 2013 y se perderán la temporada vacacional. Teniendo en cuenta que la empresa canadiense está teniendo problemas para aumentar su base de clientes, este retraso puede pasarle factura.
Por ahora, sus resultados trimestrales han sido negativos pero no tan malos como se esperaba, por lo que los mercados no se han cebado con el fabricante y sus acciones recuperaban en la sesión de hoy más de un 14%. Esto, y una caja algo más llena, le da cierto margen de maniobra para mantenerse hasta la presentación de su sistema operativo. Pero no pueden permitirse retrasarlo nuevamente.
