Después de varios meses de rumores en la Red, el último dispositivo de Apple, ya había sido diseccionado repetidas veces y sus características habían sido ya reseñadas. Si bien el finalmente bautizado como iPhone 5 cumplió con todo ello, se olvidó de sorprender a sus fieles.
Todo salió según lo previsto; “el smartphone más avanzado de la compañía”, según palabras de Philip Schiller, vicepresidente sénior de Marketing Mundial de Apple tiene pantalla Retina tiene 4 pulgadas, es más estrecho y ligero que su predecesor, funciona con el sistema iOS 6 y soporta conexiones de alta velocidad LTE.
Precisamente por eso, aunque el terminal no ha desilusionado, como ocurrió con el iPhone 4S, lo cierto es que ha sabido a poco en los círculos tecnológicos.
Fuera de las características que se conocían previamente, el iPhone 5 apenas aportó nada nuevo. Salvo un conector de tamaño reducido llamado Lightning y unos auriculares ergonómicos, llamados EarPods, cuyo desarrollo ha concluido la ‘manzana mordida’ después de tres años de trabajo. Aunque, eso sí, se adquieren por separado.
Más allá de eso, pocas novedades. Algunas de las tan rumoreadas especificaciones se quedaron en nada, como fue el caso de la conexión NFC (near field communication), que permitiría conectar dispositivos cercanos para, por ejemplo, realizar pagos con el smartphone.
Esta es una buena noticia para las operadoras que hasta ahora han intentado lanzar sus propias herramientas de pago sin contacto sin demasiado éxito, indican los analistas de CitiGroup. Pero sigue siendo una decepción para los usuarios que confiaban en ver esta tecnología en el nuevo iPhone.
Tampoco hay ni rastro de un supuesto servicio de mensajería por voz, similar al iMessenger, que se denominaba iVoice en los círculos tecnológicos. Los analistas echan más en falta esta herramienta que la de NFC. De hecho, indican los analistas de Citi, su ausencia es “preocupante”, porque podrían “haber acelerado la canibalización de la voz frente al texto”.
Para los analistas, la idea está clara. En esta ocasión, Apple ha apostado más por la universalidad que por la exclusividad, y ha prestado más atención a la compatibilidad de sus dispositivos con las redes LTE de cada país que en la innovación estricta. De hecho, iPhone 5 tiene ya tres modelos para soportar las redes de alta velocidad de EEUU, Canadá, Alemania, Reino Unido, Australia, Japón, Corea, Hong Kong y Singapur.
