Los mercados esperan expectantes la presentación de Windows 8, que esperan que mejore los resultados de ventas del gigante tecnológico que creó en su día Bill Gates en Estados Unidos.
Microsoft lleva dos años preparando el flamante Windows 8, un software que está previsto que funcione tanto para los tradicionales PC, dónde el sistema operativo es el líder indiscutible, como para dispositivos móviles, dónde tiene una gran competencia tanto de Apple como de Google.
De momento, Windows 8 está cosechando alabanzas entre los críticos del sector. La compañía de Redmond, Washington, tiene con este producto un gran reto y es conseguir atraer a un público que se ha acostumbrado a otras plataformas.
