El presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Antón Reixa, ha asegurado, en un desayuno organizado por el Foro de Economía en el Hotel Ritz, que la industria tecnológica “no han bajado ni un céntimo de euro” el precio de sus productos tras haber desaparecido el canon digital hace un año.
Además, también ha señalado que desde su organización “están trabajando para identificar a los autores y poder repartir entre ellos el excedente de 70 millones de euros que hemos recaudado”.
Reixa, elegido el pasado mes de mayo como máximo responsable de la entidad tras la salida de Teddy Bautista, ha señalado la necesidad de un cambio dentro de la SGAE que “ha cogido mala fama y desprestigio en la sociedad española”. Para salir de la crisis cultural en las que nos encontramos, ha añadido que “es necesario un valor añadido”.
Ha defendido también que “los autores tienen derecho a ser recompensados”. Para él, no existe el “gratis total, siempre hay alguien que gana algo y los autores queremos compartir esas ganancias”.
En relación a las descargas directas y a la “piratería”, el presidente ha considerado que los ciudadanos no son culpables de esta situación, “no hay piratas, sólo gente que entra en Internet y se lleva algo”.
A pesar de la voluntad de repartir los beneficios entre los autores de las obras, Reixa ha sido sincero y ha dicho que habrá residuos que no podrán ser resarcidos, pero “no tendrá que ver con las grandes cantidades que ha habido hasta ahora”.
En relación a la polémica de Teddy Bautista (desalojado del poder por una investigación judicial de la ‘Operación Saga’ aún en curso) el presidente ha asegurado que se ha impugnado su plan de pensiones, para que el dinero que pudiera corresponderle sea traspasado a un fondo social de la propia SGAE.
Las peticiones de la Asociación de Autores a diferentes colectivos han sido varias. Al Gobierno, por ejemplo, he han pedido “colaboración, ecuanimidad y cambios en la legislación de la copia privada”, mientras que a portales como Spotify le han solicitado que siga creciendo y negociando “con nosotros”.
A lo largo de toda la intervención, Reixa ha hablado sobre la importancia de poner en valor la protección de los derechos de autor y la industria cultural como resurgimiento de la economía. Ha señalado la buena idea que supondrá “incluir la cultura en el Producto Interior Bruto (PIB), tal y como hace Suecia”.
