‘The Hateful Eight’ llegará a las pantallas de unos cuantos cines estadounidenses el próximo 25 de diciembre. Un cinéfilo, casi académico como Quentin Tarantino no podía dejar pasar la ocasión de recuperar, al menos una vez en su vida, los formatos de proyección espectacular que revolucionaron el cine en la segunda mitad del siglo XX.
Era un tiempo en que la gran pantalla quiso hacerse aún más grande y utilizó sistemas como el Cinerama que debían exhibirse en salas específicamente preparadas para tal efecto. Las imágenes y el sonido eran francamente espectaculares y aquellos espectadores que tuvieron la suerte de vivirlo sí que conocieron de verdad la magia del cine.
Puro celuloide analógico tratado con procesos artesanales y de alta definición que optaban por negativos de 75 milímetros para capturarlo todo con mucha mayor fidelidad que la que podía conseguirse con los 35 milímetros habituales.
Un proceso demasiado costoso que dejó de utilizarse industrialmente hace más de dos décadas, incluso antes de que Internet y la nueva edad de oro de la televisión lo cambiarán todo y empezará a producirse la lenta e inexorable agonía de las salas de cine.
Pues bien, Tarantino ha convencido a Weinstein, la productora de su nueva película que se titulara ‘The Hateful Eight’, para utilizar este formato durante dos semanas en una cuantos locales cuidadosamente seleccionados.
El lanzamiento, que se iniciaría el próximo 25 de septiembre se alargará durante dos semanas. Posteriormente, a partir del 8 de enero del próximo año, se utilizará el formato habitual para iniciar la exhibición masiva.
‘The Hateful Eight’ es un western coral que transcurre poco después de que finalizase la guerra civil y describe el encuentro entre un grupo de personajes variopintos atrapados por una tormenta de nieve en una parada de diligencias.
