El disco grabado por el veterano cantante y la banda de rockabilly Nu Niles se sitúa en lo más alto de las listas. Seguro que no hay comparación posible. No es fácil que el nuevo álbum de Loquillo, titulado ‘Código Rocker’, haya alcanzado ni de lejos, las cifras que los discos de este indomable rockero catalán consiguieron en los ochenta.
Como paso, por ejemplo, con su mayor éxito histórico, ‘A por Ellos que son Pocos y Cobardes’ aquel inolvidable doble en directo que le convirtió en una figura popular más allá de los círculos de la música moderna en los que siempre había sido conocido.
Y, sin embargo, sólo ahora, en pleno siglo XXI, el loco ha conseguido el honor de anotarse un número uno. Probablemente, se lo merecía, aunque se trate de algo puramente simbólico, pero la industria y el público tenían una cuenta pendiente con él. Con alguien que ha conseguido sobrevivir en un ambiente hostil sin traicionarse demasiado a si mismo.
Pero lo cierto es que la magia de aquellas canciones que han demostrado su longevidad, compuestas en su mayoría por Sabino Méndez, el guitarra rítmica de los primeros Trogloditas, se mantiene intacta. Por eso la revisión de estos temas, en clave primigenia, que acaba de realizar junto a la joven banda de rockabilly Nu Niles suena tan poderosa e intemporal.
Para alzarse con el número uno, Loquillo ha tenido que desplazar al segundo puesto a Joaquín Sabina, que llevaba cuatro semanas en lo más alto con otro disco que ‘revisita’ canciones clásicas, en este caso ‘500 noches para una crisis’.
Y, quizá para demostrar, que ya sólo compran discos los más veteranos, en las siguientes posiciones de la lista están Miguel Poveda con sus ‘Sonetos y Poemas para la Libertad’, el nuevo-viejo trabajo de Van Morrison, ‘Duets: Re-working the catalogue’ y ‘Tracker’ lo último de Mark Knopfler. Buena música, desde luego. Pero con unos cuantos años de maduración en ‘barrica’ a sus espaldas.
