«Ciudadanos de Israel, estamos en guerra», declaró Netanyahu en su primera declaración pública sobre el tema, unas cinco horas después del inicio del ataque de Hamás desde Gaza y agregó que Israel «ganará».
El primer ministro continuó que el enemigo «pagará un precio como nunca antes había conocido».
Se informa de varios muertos y casi 300 heridos mientras palestinos armados se infiltraron en varias ciudades del sur, donde combaten en las calles con fuerzas del orden y ciudadanos, y siguen cayendo proyectiles en el centro y el sur del país.