Apple agita de la industria de los chips al querer controlar el interior del iPhone

Apple agita de la industria de los chips al querer controlar el interior del iPhone

El fabricante del iPhone está empezando a desarrollar sus propia tecnología gráfica y de gestión de batería para no depender de proveedores.

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Apple revolucionó la telefonía móvil con su iPhone gracias a un diseño y un software característicos. Pero lejos de quedarse ahí, la firma quiere marcar también la diferencia en la tecnología interna de sus aparatos, fabricando todos sus chips para dejar de depender de otros. Una decisión que está golpeando a las empresas de microprocesadores, especialmente a sus proveedores.

Es el caso de la alemana Dialog Semiconductor, que se desplomó ayer en Bolsa ante las informaciones que aseguran que la compañía de la manzana mordida ya está trabajando en su propio semiconductor para ahorrar batería. Según Karsten Iltgen, un analista de la firma Bankhaus Lampe, el chip estará listo en 2019 para sustituir a los circuitos de gestión de energía de la empresa germana que ahora usan los iPhone.

El gigante tecnológico habría fichado ya a 80 ingenieros, señala Iltgen, que ha rebajado su consejo sobre los títulos de Dialog de ‘mantener’ a ‘vender’, pues Apple representó el año pasado el 70% de las ventas de la alemana.

Sus acciones llegaron a hundirse en Bolsa más de un 30%, hasta mínimos en siete meses, después de haberse revalorizado un 100% en el segundo semestre de 2016 precisamente gracias al iPhone. Al cierre de la sesión consiguió moderar las pérdidas, pero continuaron en el doble dígito.

Dialog no es la única empresa que sufre en los mercados el propósito de Apple de tomar el control del diseño y desarrollo del interior de sus dispositivos móviles. La semana pasada le ocurrió lo mismo a la británica Imagination Techonologies, que hasta ahora fabricaba los chips gráficos de los ‘smartphones’, tabletas y relojes inteligentes de la compañía estadounidense.

Imagination anunció que la empresa presidida por Tim Cook les había anunciado la rescisión del contrato de desarrollo de GPU (Unidades de Procesamiento Gráfico, por sus siglas en inglés) que mantenían porque ya estaban creando su propia tecnología “para ejercer un mayor control sobre sus productos”. Sus títulos cayeron entonces un 70%.

El fabricante de tecnología de gráficos no se tomó nada bien la decisión de Apple, y aseguró que es imposible que los de Cupertino puedan desarrollar procesadores GPU sin violar patentes, anticipando una nueva guerra judicial por propiedad intelectual para la compañía de la manza mordida: “Apple no ha presentado pruebas que respalden sus afirmaciones de que prescindirá de la tecnología de Imagination sin cometer infracciones contra las patentes, la propiedad intelectual y la información confidencial de la empresa. Imagination ha requerido dichas pruebas, pero Apple ha declinado proporcionarlas”, afirmó.

Se sumaría al frente que mantiene con otro fabricante de procesadores: Qualcomm. Este mismo martes se conocía que la estadounidense había demandado a Apple por favorecer a Interl con los chips del iPhone 7.

Según Qualcomm, limitó el rendimiento de los modelos que incorporan sus chips, frente a aquellos que usan los de Intel, el otro proveedor de procesadores del iPhone 7, y les amenazó para que no revelaran la verdad sobre el rendimiento.

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