Medio Ambiente
“Cuando los impuestos sobre los combustibles más contaminantes son cero o casi cero, hay pocos incentivos para cambiar”, reflexiona el secretario general de la OCDE, Angel Gurría.
Imponer impuestos a las fuentes de energía contaminantes puede ser una forma eficaz de frenar las emisiones que perjudican al planeta y a la salud humana. Así al menos lo considera la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en un reciente informe, conocido en plena Cumbre del Clima en Nueva York, en el que matiza que esta subida de impuestos no tiene por qué repercutir en los hogares más vulnerables: los ingresos generados pueden utilizarse para facilitarles la transición hacia una economía con bajas emisiones.