Génova calla sobre la propuesta de un Pacto de Estado de Piqué

Nacional

Génova calla sobre la propuesta de un Pacto de Estado de Piqué

Silencio. Esta es la respuesta que han dado a EL BOLETIN fuentes oficiales de la dirección nacional del PP sobre la propuesta de un Pacto de Estado y un gobierno de concentración que ha hecho hoy uno de sus exministros con José María Aznar, Josep Piqué, junto al socialista Jordi Sevilla.

“Nada, aquí nadie ha dicho nada” al respecto. Así de claros y tajantes se muestran desde la cúpula nacional del PP ante el guante lanzado por uno de sus compañeros de filas: Josep Piqué. El llamamiento del exministro de Industria y actual presidente de Vueling y del Círculo de Economía a través de las páginas de El País parece que ha caído en saco roto.

Piqué, junto a Jordi Sevilla, llama a los partidos a “arrimar el hombro” en un artículo titulado ‘Juntos mejor’. En este texto, ambos exministros claman por un Pacto de Estado con el que “salgamos antes y mejor del pozo”. “Tal vez es hora de que la sociedad civil lo reclame, todavía más alto, a los políticos”, insisten los autores.

Un pacto con el que “superar el serio problema de liquidez que sí tenemos y que se extiende por toda la sociedad en forma de escasez de crédito necesario para relanzar actividad productiva”. Para Piqué y Sevilla, lo fundamental es “generar confianza en los mercados financieros internacionales” y nada mejor que “elaborar un Plan Estratégico de país, uniendo en torno al mismo al mayor número de ‘accionistas’ posible”. Unos ‘accionistas’ que serían los partidos políticos.

Y es que, admiten que el Gobierno tiene mayoría parlamentaria “suficiente para hacerlo en solitario, si ese es su deseo, o buscando solo unos aliados frente a otros”. “Sería legal y legítimo”, aseguran, “pero pensamos que, en situaciones excepcionales, incorporar al proceso de rediseño del modelo a los millones de ciudadanos que se sienten representados por opciones distintas a la gubernamental, daría grandeza política a quien gobierna, haciendo que el resultado fuese más sólido, eficaz y asumido”.

La propuesta que el extitular de Industria del PP y del exministro socialista no es la única que se ha escuchado al respecto en los últimos días. Ya el pasado viernes, en las mismas páginas del diario El País, tres expertos economistas insistían en la necesidad urgente de “un nuevo gobierno” con el apoyo de todos los partidos mayoritarios y de nuestros expresidentes”.

Los catedráticos Jesús Fernández-Villaverde, Luis Garicano y Tano Santos aseguraban que este “nuevo” ejecutivo debe trabajar con “tres prioridades”. “Primero, poner de verdad en marcha las reformas necesarias reconstruyendo la confianza de inversores extranjeros, contribuyentes españoles y socios europeos. Segundo, afirmar, sin ambigüedad, el compromiso absoluto con el euro y la construcción europea”.

Por último, remarcaban la necesidad de “plantear a nuestros socios, desde la confianza generada por un gobierno coherente y serio, una ayuda económica en condiciones para resolver el único problema que no podemos resolver solos: el agujero creado por la burbuja inmobiliaria en el sistema financiero, a cambio de un control europeo de los bancos rescatados y de un sistema regulador común”.

Entre medias de un artículo y otro, este mismo sábado hemos podido ver Mariano Rajoy en el Círculo de Economía del propio Piqué solicitando la creación de una “autoridad fiscal europea que pueda orientar la política fiscal en la zona euro”. Según el presidente del Gobierno, esta “autoridad” podría armonizar “las políticas fiscales de los estados miembros” y permitir “un control centralizado de las finanzas”. Asimismo, pidió calma ante la situación económica.

Más información