La ex diputada admite que el “PP hierve en cábalas sobre cuándo y quién debe suceder a Rajoy». La ex diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo publica un demoledor artículo hoy en El Mundo en el que pinta un panorama muy negro para el partido “si sigue aferrado a Rajoy” y en el que advierte que si no hay una refundación, incluso con nuevas siglas, la formación puede acabar como UPyD.
En la tribuna, titulada ‘Presenta desorientación’, Alvarez de Toledo, reconoce que Rajoy puede llegar a ser recordado como “el presidente que sacó a España de la más profunda crisis económica de su historia reciente», pero también como «el hombre que sumió al centroderecha español en la más profunda crisis política desde su refundación en 1990”.
Se queja de que “el PP ha pasado en cuatro años de la cima de la mayoría absoluta al abismo de una posible descomposición” haciendo notar que el partido “no sólo ha perdido casi todo el poder territorial y político acumulado durante décadas: gobiernos autonómicos, diputaciones, ayuntamientos, la capital de España, decenas de escaños”.
Y señalando que además, “el PP ya no es el único referente en el centroderecha y corre el riesgo de perder definitivamente esa condición si no se empeña en una catarsis total. Si continúa aferrado a Rajoy. Si no es capaz de formular un proyecto político para España”.
La ex diputada deja a los pies de los caballos al ministro Alfonso Alonso, al que “hace unos días, cuando le preguntaban por las muchas voces que en sordina reclaman un nuevo liderazgo, el ministro Alfonso Alonso sentenció: ‘Nadie en el PP se plantea sustituir ahora a Rajoy’. Alvarez de Toledo pregunta irónicamente “¿Nadie?¿De verdad nadie?” y recalca “que se lo pregunten a cualquier becario del más tierno brote digital”. Subrayando que “en el centro y en la periferia, en los escaños y en la calle, en las sedes de distrito y hasta en la séptima de Génova, el PP hierve en cábalas y comentarios sobre cuándo y quién debe suceder a Rajoy”.
Deja claro Alvarez de Toledo que, en su opinión, «Rajoy no puede ser el candidato en una hipotética segunda vuelta electoral porque ganar es gobernar y Rajoy no ha podido hacerlo» y explica que sería incomprensible que un hombre incapaz de presentarse a su investidura quisiera comparecer de nuevo ante los votantes. Además, entre los motivos principales de su derrota está la ausencia de un proyecto».
Concluyendo un mensaje muy negro para un partido que llega a calificar de «senil»: “Si el PP opta por la continuidad en las personas y en las prácticas, si no emerge como un partido nuevo -incluso con nuevas siglas y desde luego con una sede distinta- puede prepararse: su destino será la fusión por absorción de Ciudadanos, en la triste estela de UPyD”.
