El ministro de Interior garantiza que los controles para evitar que se infiltren yihadistas no perturbará el proceso de acogida de refugiados en España. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró en la COPE que “el buenismo oficial” se le “ha echado en encima” por anunciar que su Departamento tomará las medidas adecuadas para evitar la posible infiltración de yihadistas entre los refugiados que España acogerá.
El titular de Interior insiste en que esa posibilidad existe y precisó que “aunque lo urgente es acoger a los ciudadanos lo que debe hacerse es compatible con la seguridad, por lo que se van a establecer medidas oportunas se hagan con las garantías de seguridad que la sociedad española requiere”.
Insiste Fernández Díaz: “La acogida a los refugiados es lo más urgente. Pero soy el ministro del Interior y tengo que velar por la seguridad”, y explica que después de la acogida se harán los controles pertinentes, que se realizarán “sin perturbar el proceso de acogida. E informó que se mantiene el nivel de alerta 4, “ante un riesgo alto de comisión de un eventual atentado terrorista”. Para después adelantar que el lunes previsiblemente se oficializará el número de refugiados que irán a cada país.
El ministro de Interior también matizó las declaraciones ayer del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, (que defendió una reforma de la Constitución para encajar el ‘hecho catalán’ y cambiar el sistema de financiación para ceder casi todo el IRPF a Cataluña) al considerar que sus palabras “se han
sacado de contexto» y después aclaró que la reforma constitucional no está entre las prioridades del Gobierno “no está en nuestro objetivos políticos ni en nuestro programa electoral”, concluyendo que “si se trata de contenta a los independentistas catalanes no procede ninguna reforma de la Constitución”.
Jorge Fernández Díaz ha vuelto a emplazar al presidente de la Generalitat, Artur Mas, a que revele quién le informó a él o a CDC del registro que el día 28 de agosto iba a efectuar en su sede la Guardia Civil ya que quien lo hubiera hecho habría cometido el delito de revelación de secretos.
