En las tertulias de lo que más se ha hablado esta mañana era del lío del PP a cuenta del culebrón del cese de Ricardo Costa, con dos conclusiones claras: la confusión imperante en el partido, con ruedas de prensa y comunicados contradictorios, y el desafío que Costa han lanzado a la dirección nacional. En Onda Cero, Mamen Gurruchaga y José Antonio Vera estaban de acuerdo en que Costa es “un cadáver político”, ya que como recalcaba Pepe Oneto no se le puede echar un pulso al aparato del partido, subrayando el “espectáculo poco reconfortante” que está dando el principal partido de la oposición. En el mismo sentido se expresaba en la COPE José Antonio Navas que también cree que hay un pulso entre Costa y el PP nacional.
Sin embargo, Carlos Cúe quiso subrayar el papel que ha tenido Francisco Camps en todo este embrollo al señalar que ayer asistió a la rueda de prensa de Costa en Valencia y que la sensación de los más de 40 periodistas allí concentrados coincidieron en que Camps engañó a Rajoy al contarle una versión distinta de la que el ahora ex secretario general del PP valenciano ofreció a los medios. Precisamente, en la SER pusieron el acento en el papel del presidente de la Generalitat en todo este caos, después de que Carles Francino preguntara ¿a qué juega Camps? Ámparo Tórtola cree que juega a dos cosas: una huída para adelante y a ganar tiempo y explicó que Camps se siente electoralmente muy fuerte en la Comunidad valenciana. Javier Pérez Royo recalcó que hay una falta de respeto tremenda de Camps y Costa hacia Rajoy y dijo que “sorprenden la multitud de caras de alegría y sonrisas que se podían ver ayer en el Comité regional del PPCV a la entrada de Camps y Costa: parecía como el paseíllo de un torero que sale a hombros después de cortar dos orejas”. Más información en la sección de Nacional
