Así lo ha anunciado el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, quien ha destacado que la actividad escolar, que se ha retomado en el día de hoy en los municipios afectados por la erupción, se ha desarrollado «con absoluta normalidad» pero, en previsión de que pudiera llegar la colada, se ha tomado esta decisión en los centros de Tazacorte.
Miguel Ángel Morcuende ha indicado que la situación de las dos coladas que están en las proximidades de La Laguna es de «estabilidad y lentitud», por lo que no se han producido nuevos derrames. La colada que rodea la Montaña de La Laguna por el suroeste se encuentra a unos 160 metros del mar pero avanza muy lentamente, apenas 2 metros por hora.
El director técnico del Pevolca ha explicado que esta colada está sufriendo una «clara pérdida de lava» que causa un crecimiento de su espesor, pero se sigue monitorizando su avance para tomar, si fueran necesarias, las medidas preventivas para la población del municipio de Tazacorte en el caso de que llegue al mar.
En este sentido, manifestó que, como se sabe, el contacto de la lava con el mar puede provocar explosiones y emanación de gases nocivos para la población próxima por lo que, en este caso, se decretaría el confinamiento de algunos núcleos costeros de Tazacorte, como ya se hizo con la anterior colada que alcanzó el mar.
Con respecto a la otra colada que baja por el campo de fútbol de La Laguna, Miguel Ángel Morcuende precisó que está «prácticamente parada» y casi «no tiene aporte», por lo que ahora mismo las condiciones son de «paro» o de un movimiento «muy pequeño». En cualquier caso, se sigue vigilando.
