La defensa del procesado Ángel Boza había solicitado que se redujese a 13 años y 9 meses, según han informado desde el TSJN.
En el auto, que puede ser recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), los magistrados sostienen que la pena de 15 años de prisión “resulta igualmente susceptible de imposición con arreglo a la nueva regulación de los delitos contra la libertad sexual”.