La frenética oleada de presentación de resultados de la banca de EEUU continúa sin que hasta el momento haya sorpresas desagradables, sino más bien todo lo contrario. Hoy le tocó el turno a Bank of America y Citigroup y, en los dos casos, batieron las previsiones del mercado. Bank of America registró un beneficio de 3.220 millones de dólares (0,32 dólares por acción) en el segundo trimestre, apenas un 5,5% menos que en el ejercicio anterior.
La cifra supera con creces las ganancias de 0,28 dólares por título que esperaban los analistas consultados por Thomson Reuters. El beneficio del mayor banco estadounidense incluye el pago de 713 millones de dólares como devolución de parte de las ayudas públicas recibidas. Este lastre no ha evitado que la entidad lograra dos trimestres consecutivos de ganancias, después de las pérdidas de 1.700 millones de dólares contabilizadas de octubre a diciembre del pasado año, sus primeras pérdidas trimestrales en los últimos 17 años.
Mientras, Citigroup obtuvo un beneficio de 4.280 millones de dólares (0,49 dólares por título) en el segundo trimestre, frente a las pérdidas de 2.495 millones del trimestre anterior. Sin embargo este resultado se debió a la venta por 6.700 millones de dólares de Smith Barney. El mercado esperaba unas ganancias de 0,33 dólares por acción.
Excluyendo estos extraordinarios, el que fuera el mayor banco del mundo y que ahora es propiedad en un 34% del Estado, habría registrado una pérdida operativa de 0,27 dólares por acción.
> Así, a la espera de que Morgan Stanley haga públicas sus cuentas el próximo miércoles, la gran banca de EEUU ha aprobado con nota el ‘examen’ trimestral.
Bank of America, Citigroup, JP Morgan Chase y Goldman Sachs se han visto beneficiados de la oleada de macroampliaciones de capital y de la mejora generalizada de los mercados en el que ha sido el mejor trimestre de la década para las bolsas. Estos hechos han acelerado los ingresos en el área de la banca de inversión.
