El Parlamento finlandés tendrá que debatir el próximo año la propuesta de volver a sus viejos marcos que ha conseguido 50.000 firmas entre los ciudadanos del país. La estabilidad de la Zona Euro vuelve a enfrentarse a un riesgo hasta ahora inesperado. Finlandia votará el año que viene su posible salida de la moneda única. El único país nórdico que hasta la fecha se ha integrado en la divisa comunitaria podría abandonarla por iniciativa de sus propios ciudadanos.
No se trata de la promesa de ningún partido político. La posible salida de Finlandia de la Zona Euro es consecuencia de una iniciativa ciudadana que acaba de conseguir reunir las 50.000 firmas necesarias para que su propuesta se debata oficialmente en el Parlamento nacional. Según la normativa vigente en el país, el trámite podría tener lugar en los primeros compases del año próximo.
Aunque economistas y políticos del país nórdico explican que es muy improbable que Finlandia pueda acabar fuera del euro volviendo a sus antiguos marcos, esta situación muestra el descontento de la población finlandesa por el desempeño económico de su país, que acumula tres años de contracción.
El debate en el Parlamento finlandés será muy probablemente el primero que sobre esta materia se mantenga en el seno de los países de la Unión Monetaria. En este sentido, ni siquiera el referéndum convocado en Grecia por Syriza planteaba el regreso al dracma del país heleno. Una posibilidad que, sin embargo, sí se llegó a considerar en varios momentos como imperativo de la Troika.
Una portavoz del Parlamento en cuestiones de iniciativas ciudadanas, Maija-Leena Paavola, ha explicado que lo primero será proceder a la revisión de las firmas recogidas por los colectivos implicados en esta iniciativa. Algo que, a su juicio, tendrá lugar “a comienzos del próximo año”.
A pesar de que la propuesta ha alcanzado el umbral necesario para, en principio, forzar una tramitación en sede parlamentaria, el último Eurobarómetro mostraba un amplio respaldo a la moneda única por parte de la población finlandesa. Según los datos del sondeo, un 64% de los ciudadanos de la nación nórdica es favorable a la permanencia en el euro.
