Un nuevo escándalo de acoso sexual salpica Silicon Valley. Según ha revelado The New York Times, en la última década Google ha protegido a tres altos ejecutivos acusados de “conducta sexual inapropiada”, entre los que figura el ‘padre’ de Android, Andy Rubin. En este caso, una investigación interna determinó hace cuatro años que la denuncia realizada por una subordinada era “creíble”, lo que provocó que Rubin saliera de la compañía… con una jugosa indemnización de 90 millones de dólares (unos 79 millones de euros) y un silencio total al respecto.
Aunque este es el caso más flagrante, debido a la credibilidad de la acusación y la relevancia de Rubin, el rotativo enumera otros dos casos en los que el gigante de Internet “calló sobre las acusaciones contra los hombres”. Y no solo eso: tanto el creador de android, como otro de los altos cargos fueron compensados con millones de dólares por la firma “aun sin haber obligación de hacerlo”, mientras que el tercero aún permanece en su puesto.
Rubin, a través de un portavoz, ha negado las informaciones y ha asegurado que su renuncia fue por decisión propia y no tenía conocimiento de la denuncia por conducta inapropiada.
Pese a ello, el demoledor reportaje ha obligado al consejero delegado de Google, Sundar Pichai, a reconocer que ha despedido a cerca de medio centenar de empleados en los dos últimos por casos de acoso, de los que hasta 13 ocupaban altos cargos de gestión.
En un correo electrónico remitido a sus empleados, Pichai ha afirmado que 13 de estos extrabajadores eran “altos cargos” y que “ninguno de ellos” recibió un monto de compensación tras el despido.
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