Galicia sigue los pasos de Ayuso y Moreno y rebajará el impuesto de Patrimonio

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Galicia sigue los pasos de Ayuso y Moreno y rebajará el impuesto de Patrimonio

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anuncia una nueva rebaja del 25% en el impuesto para 2023, lo que supondrá una bonificación del 50% en la región.

El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, en una imagen de archivo. (Foto: Xunta)

Las rebajas fiscales a las rentas altas impulsadas por el PP se extienden a Galicia. El presidente de la Xunta, el popular Alfonso Rueda, sigue los pasos dados por la Comunidad de Madrid y por Andalucía y ha anunciado un nuevo descenso en el impuesto de Patrimonio. En concreto, una reducción del 25% en este gravamen para 2023, lo que supondrá una bonificación del 50% en la región.

Así lo ha adelantado el sucesor de Alberto Núñez Feijóo al frente del Gobierno gallego en un acto organizado por La Voz de Galicia y Abanca, apenas unos días después de que Andalucía diera luz verde a la supresión, en la práctica, del impuesto de Patrimonio. La Junta que preside Juanma Moreno ha aprobado una bonificación del 100% al mismo. Algo que ya estaba vigente en la Comunidad de Madrid. Todo, ha defendido el citado presidente andaluz, para atraer más inversores a esta región.

A esta ola se ha sumado también la Región de Murcia, gobernada igualmente por el PP. El presidente de esta comunidad, Fernando López Miras, avanzó este jueves que su Ejecutivo va a poder abordar “muy probablemente” para el próximo ejercicio 2023 la eliminación del impuesto de Patrimonio, “compensándolo con los ingresos extraordinarios” que lleguen a la región.

“Ni nosotros, ni ningún otro gobierno, puede tomar una decisión de esa trascendencia sin que cuadren las cuentas”, admitió López Miras en una entrevista en TVE recogida por Europa Press, en la que señaló que si Gobierno está “cuadrando la previsión de ingresos y lo que supone el impuesto de Patrimonio en la región”.

Precisamente, el Gobierno murciano aprobó ayer una rebaja de la escala autonómica del IRPF. En concreto, de un 4,1% para los cuatro primeros tramos para “ayudar a las familias a hacer frente a la elevada inflación”.

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