Así lo ha indicado el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en funciones, José Manuel Albares, en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press, en las que ha vuelto a indicar que hasta el momento no se tiene constancia de que haya ningún español entre los más de 2.000 muertos y los más de 2.000 heridos del seísmo.
Según ha indicado, en los dos vuelos militares que han llevado hasta Marruecos a efectivos de la UME y otros rescatistas se ha repatriado a 36 españoles. Se trata, según ha puntualizado, de “españoles en necesidad más perentoria y urgente” que, además de encontrarse en el lugar, están teniendo dificultades para encontrar vuelo y alojamiento y están acompañados de menores.
En este caso, ha aclarado el ministro, ni España ni ninguno de sus socios está sopesando una “repatriación como tal” puesto que estas solo se realizan cuando hay “imposibilidad material para salir de un país por escenario bélico” o como ocurrió en Níger tras el golpe de Estado de finales de julio “por motivos políticos se ha decidido cerrar las fronteras”.
En el caso de Marruecos, no se ha cerrado el espacio aéreo y las aerolíneas están operando con normalidad. Lo que se ha hecho, ha indicado Albares, es hablar tanto con Iberia como con Binter para que envíen aviones con mayor capacidad para los vuelos que operan y en el caso de la primera ha flexibilizado tarifas y cambios de vuelo.
Además, Exteriores ha desplazado al país vecino una unidad consular que está ayudando a los españoles a encontrar alojamiento, a cambiar sus vuelos o a dirigirles vía terrestre o por ferrocarril hasta Tánger, desde donde se puede tomar un ferry hacia Algeciras o Tarifa.
Por otra parte, ha indicado que los 18.000 españoles residentes en Marruecos están “totalmente bajo control y se encuentran perfectamente” y en cuanto a los cientos que había en el reino alauí por distintos motivos cuando se produzco el seísmo, todos están bien salvo “dos en tránsito con los que no se ha podido establecer contacto telefónico”.
on todo, Albares ha subrayado que tanto la Embajada como los distintos consulados y también la unidad de emergencias consulares del Ministerio están en contacto constante con hospitales, comisarías y las autoridades y “no consta ningún español”. Así las cosas, ha admitido que “con el paso de las horas” está “más esperanzado de que estas buenas noticias sean las finales” y por tanto no haya víctimas españolas en la tragedia.
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