Una mujer vive en la tumba de su esposo y pone hasta Internet

Curiosidades

Una mujer vive en la tumba de su esposo y pone hasta Internet

Una mujer argentina acondicionó el mausoleo de su difunto esposo como si fuera una vivienda para pernoctar allí los días en que visita el cementerio. La viuda ha instalado en la tumba, una tele, cocina a gas, cama y un ordenador con Internet. En el sepulcro hace fiestas con música e incluso fuegos artificiales.

La viuda viaja cada dos meses desde Buenos Aires, donde vive, al cementerio de la localidad misionera de Dos de Mayo para visitar el nicho donde descansan los restos de su esposo y cuando lo hace pernocta en el mausoleo donde ha instalado un ordenador con Internet, televisor, cocina a gas, cama y su propio medidor de luz, según peru21.com.

“Mi idea es que no puedo pagar tanto dinero para quedarme en un hotel mucho tiempo y aparte lo vengo a ver a él, es el único familiar que tenía”, explicó Villarreal al sitio argentino Misiones Online.

El insólito episodio fue confirmado por el comisario Gustavo Braganza, jefe de la repartición de la localidad de 19.000 habitantes ubicada a 200 kilómetros de Posadas. La mujer fue identificada como Adriana Villarreal, de 43 años, quien vive en la provincia de Buenos Aires y hace dos años viaja a Dos de Mayo, cuando murió su ex pareja, Sergio Reneé «Checho» Yede (28), en extrañas circunstancias.

Sin embargo a esta señora se le acabó el chollo, ya que la Municipalidad de Dos de Mayo, en la provincia de Misiones, ordenó cerrar con un candado la puerta del panteón que alberga los restos de su esposo, fallecido en 2010-

La decisión de clausurar el mausoleo se tomó debido a las quejas de algunos visitantes del cementerio, que denunciaron que la mujer ponía música a todo volumen

El comisario de la Policía de Dos de Mayo, envió a unos agentes a inspeccionar el mausoleo, donde fueron atendidos por la propia viuda en pijama. Los efectivos le comunicaron a la mujer los horarios de visita del campo santo y de la prohibición de pernoctar en dicho lugar.

“Pongo música despacito porque a él le gustaba la música, tengo mi computadora con Internet”, afirmó la mujer de 43 años, que agregó que no tenía miedo de dormir al lado del féretro, que tiene la tapa transparente, porque “los muertos no hacen nada”. “Hay que cuidarse de los vivos”, añadió.

Según contó el jefe policial, la mujer los “atendió vestida con pijama”. Además, indicó que no se advierte que tenga las facultades mentales alteradas y se percibe que tiene un “muy buen pasar económico”.

Según el comisario, ella va al nicho en Navidad y Año Nuevo para celebrar las fiestas junto al cadáver de su difunto esposo, cuyo cuerpo está embalsamado y se puede ver a través de un vidrio, y aseguró que incluso lleva fuegos artificiales.

“Todos comentan que el día que falleció el hombre, el 16 de junio de 2010, fue una ceremonia particular, debido a que cuando se puso el féretro en el nicho también hubo música y un se ofreció un aperitivo para los allegados. Antes hubo una caravana de autos con bocinazos y cohetes”, indicó el funcionario.

“Cuando se ama mucho a un hombre una puede hacer ese tipo de cosas. Mi marido se merece eso y mucho más” señaló la viuda.

Más información