El dispositivo tiene en cuenta que el partido ha sido declarado de ‘Alto Riesgo’ y que España está en el Nivel 4 de riesgo de atentados terroristas. Un total de 1.191 efectivos de seguridad velarán porque todo transcurra con normalidad en el partido de Champions League entre el Atlético de Madrid y el Galatasaray de Turquía que se celebrará mañana miércoles, a las 20.45 horas en el estadio Vicente Calderón.
En concreto serán 400 efectivos policiales (UIP-UPR-Caballería-Guías Caninos), 100 agentes de la Policía Local, 60 efectivos de Protección Civil-Samur, 33 de Cruz Roja y 498 vigilantes privados. Así se ha acordado en la reunión de coordinación de seguridad que ha tenido lugar en la Delegación del Gobierno en Madrid con motivo del partido de fútbol de Champions League entre ambos equipos.
La delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Concepción Dancausa, ha explicado que “estas medidas suponen, en la mayoría de los casos, un incremento superior al 30% respecto a otros partidos similares. Hemos continuado con la línea de seguridad marcada en este tipo de encuentros y además hemos tenido en cuenta el carácter internacional del partido y su repercusión mediática”.
Dicho encuentro ha sido designado como de “Alto Riesgo” por la UEFA. A esta situación se añade la declaración de Nivel 4 de riesgo de atentados terroristas que tiene España. El dispositivo policial se iniciará en torno a las 17 horas y habrá un control exhaustivo en la entrada al estadio de todos los aficionados.
El Atlético de Madrid y la Oficina de Deportes comunicarán al Galatasaray la necesidad de que sus aficionados lleguen al recinto deportivo con suficiente antelación para evitar aglomeraciones. Asimismo, en la página web del club organizador se comunicará a todos los aficionados que las puertas del estadio abrirán dos horas antes y que es conveniente acudir de manera escalonada para evitar las aglomeraciones del último momento, puesto que al ser día laborable, son muchas las personas que acuden directamente después de finalizar su jornada laboral, disponiendo de menos tiempo que cuando el encuentro se realiza en fin de semana.
