El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Pablo Casado, han solventado en 40 minutos su primera reunión un mes después de las elecciones generales. Una cita en la que ambos han escenificado la distancia que les separa. No hay más que ver las caras serias que han marcado el inicio del encuentro. Tras él, la situación no ha cambiado. El popular se ha reafirmado en su ‘no’ a investir al socialista y ha criticado su actitud.
“Sánchez ha intentado que el PP sea una coartada a una decisión libre y meditada”, ha censurado el máximo responsable de los populares en una rueda de prensa casi una hora después del término de su reunión con el jefe del Ejecutivo en funciones. Según Casado, “el Partido Popular no puede ser un partido que blanquee ese pacto con Podemos”.
Para el popular el encuentro de este lunes ha sido un “simulacro de acercamiento al PP” de un presidente del Gobierno que “está instalado en el ‘no es no’ a cualquier alternativa que pase por romper con Podemos”. Y es que, Sánchez no está dispuesto a romper el acuerdo con Pablo Iglesias.
La “única oferta al PP” que le ha transmitido el líder del PSOE al del PP, ha explicado este último, “es que nos abstengamos para facilitar Gobierno de PSOE con Podemos de vicepresidente”. Así se lo ha trasladado hasta en varias ocasiones. Una cuestión ante la que Casado ha sido firme: “nadie en España entendería que PP facilitara Gobierno con Podemos”.
En su opinión, el socialista tiene “más alternativas”, y pasan por un Ejecutivo en solitario con apoyos de Podemos y Ciudadanos o un Gobierno, también en solitario, con apoyos de izquierdas y nacionalistas y abstención de Ciudadanos.
