Profesionales y pacientes ‘inundarán’ este domingo las calles de Madrid para celebrar el fin de las privatizaciones y para defender la “calidad y universalidad” de la Sanidad pública. La Marea Blanca volverá a las calles de Madrid este domingo para mostrar el rechazo de los ciudadanos a la política sanitaria del Gobierno de Ignacio González, una protesta en la que tendrá un papel protagonista el Hospital de La Princesa. El centro en el que se inició el movimiento de ‘batas blancas’ que ha logrado frenar las privatizaciones ha sido el lugar elegido por profesionales y pacientes para iniciar esta manifestación.
La protesta se realizará el 16 de marzo, ya que es habitual que el colectivo se manifieste el tercer domingo de cada mes. Según ha informado la Mesa en Defensa de la Sanidad Pública (MEDSAP) en el cartel de la convocatoria, la marcha arrancará a las 12 horas de La Princesa (C/ Diego de León 62) bajo el lema ‘Sí se pudo’, en referencia a la victoria de la Marea Blanca sobre los planes privatizadores del PP.
De ahí, la manifestación discurrirá por la calle Francisco Silvela, la Plaza de Manuel Becerra y la calle Alcalá para acabar en la Puerta de Alcalá. Una cita que profesionales y pacientes aprovecharán para pedir con “una sola voz” que se recupere la “calidad y universalidad” de la Sanidad pública y que se reviertan las externalizaciones de servicios llevadas a cabo recientemente, como la privatización de la Lavandería Central Hospitalaria o de las donaciones de sangre, ya que Cruz Roja se encarga de las extracciones a pie de calle desde el pasado 1 de marzo.
Se trata de la segunda manifestación que se celebra tras la marcha atrás de la Comunidad de Madrid en sus planes para privatizar la gestión de seis hospitales, y también la segunda a la que se enfrenta el consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, desde que asumió el cargo. Y es muy probable que el sucesor de Lasquetty se convierta en diana de las críticas de la Marea Blanca por sus últimas decisiones, como la de recuperar al ideólogo de las privatizaciones, Antonio Burgueño, como asesor de su departamento, aunque finalmente el exdirector general de Hospitales rechazó reincorporarse a la Comunidad de Madrid por la polémica y el revuelo que suscitó la noticia.
