El Grupo Popular en el Senado ha admitido una enmienda de UPN a la LOMCE que permite financiar con dinero público a los colegios que segregan por sexos. La Marea Verde ha cargado de nuevo contra el PP, esta vez por saltarse las sentencias del Tribunal Supremo para tener contento al Opus Dei. Según el colectivo que defiende la escuela pública, esa es la única razón que explica que el Grupo Parlamentario Popular en el Senado haya admitido una enmienda a la Ley de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) que permite financiar con dinero público a los colegios que segregan por sexo.
Tal y como explica en un comunicado la Federación de Enseñanza de CCOO, que forma parte de este colectivo, el PP ha “burlado” al Senado para beneficiar a sectores muy concretos de la Iglesia. Según explica el sindicato, la decisión de los populares hace que las leyes y las sentencias dictadas por el Supremo se conviertan en “papel mojado” para beneficiar al Opus Dei, “el principal perjudicado por las sentencias del Tribunal”.
“La nueva estrategia del PP permitirá que, dos meses después de aprobarse la reforma educativa, los centros que separan a niños y niñas recuperen las subvenciones que el Tribunal Supremo vetó por ser contrarias a la ley”, ha criticado CCOO tras conocer que los ‘populares’ han admitido una enmienda de Unión del Pueblo Navarro (UPN) para “blindar” estas subvenciones.
En opinión del sindicato, el impulso que de esta forma ha dado el PP a determinados sectores de la Iglesia para que no tengan que esperar a 2017 para “volver a financiarse con fondos públicos” es una “burla” más de al Supremo, y además “contraviene la normativa europea a favor de la igualdad entre los sexos y nuestra propia Constitución”. Por ello, CCOO ha denunciado esta situación ante la Comisión Europea.
“El Partido Popular impone su criterio frente al del Tribunal Supremo, que vetó en varias sentencias la financiación con dinero público de este tipo de centros”, asevera la Federación de Enseñanza del sindicato, que defiende la escuela mixta como “un valor democrático que ha permitido que mujeres y hombres hayan alcanzado cotas de formación importantísimas en nuestro país, además de fomentar el aprendizaje normalizado de las relaciones entre los sexos”.
Tal y como explica CCOO, “separar a niños y niñas en centros o aulas sólo se sostiene si entendemos que los currículos educativos deben ser diferentes, como ocurría antes de la ley del 70. Esta segregación supone el refuerzo de una educación estereotipada según los sexos, que fomenta los tradicionales roles diferentes de hombres y mujeres y la correspondiente discriminación femenina, algo que nuestra sociedad y nuestras leyes democráticas han de desterrar”, ha sentenciado.
