El candidato del PP a la Alcaldía de Barcelona rechazaba antes de la campaña hacer alcalde a un Xavier Trias. Ahora, le ha pedido que busque una alternativa tras la victoria de Colau. El Partido Popular parece haberse olvidado de sus críticas separatismo de CiU tras la victoria de Barcelona en Común en las elecciones al Ayuntamiento de Barcelona del 24 de mayo. Los populares han pasado de atacar a Xavier Trias y los suyos a, según ha desvelado el propio alcalde en funciones de la ciudad condal, estar dispuestos a apoyar un frente nacionalista que frene la llegada de Ada Colau a la Alcaldía.
El candidato del PP en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, lo tenía muy claro a principios de mayo, días antes de que arrancase la campaña: es “absolutamente incompatible” que su partido haga alcalde al “independentista” de Trias o a la “antisistema” de Colau.
Así lo manifestaba en una rueda de prensa en la Agencia EFE en la que recordaba el tradicional “voto oculto” del PP y defendía que la fragmentación política podía “dar una nueva oportunidad al PPC para ser la sorpresa”. “¿Por qué no podemos aspirar a ser la lista más votada?”, se preguntaba a principios de mayo Fernández Díaz. Una cuestión para la que él mismo tenía respuesta, ya que se proponía ser capaces “de concentrar a todos los barceloneses que no creen en la ‘estelada’ de Trias ni en los criterios antisistema de Colau y Pablo Iglesias”.
Además, el candidato de los populares al consistorio de la ciudad condal advertía por entonces que era “absolutamente incompatible que pueda dar apoyo a un alcalde Trias independentista o una Ada Colau antisistema, porque sería claramente contrario a nuestro planteamiento”.
Una postura que el propio Fernández Díaz y el PP catalán han defendido a lo largo de la campaña, pero que choca directamente con lo desvelado esta mañana por el alcalde en funciones de Barcelona.
En una entrevista en esta mañana en TV3 recogida por Europa Press, el dirigente de CiU ha desvelado que Alberto Fernández Díaz le ha pedido que busque una alternativa de Gobierno, y que la apoyará, aunque sea con grupos opuestos, como ERC. Si bien luego Fernández ha matizado que defiende el pacto pero sin grupos independentistas. Además, ha reiterado que hay mayorías posibles, aunque no cruzará ninguna ‘línea roja’. «Barcelona no puede ser la capital antisistema, pero tampoco la del independentismo», ha añadido.
