El acuerdo entre Grecia y sus acreedores y los índices de confianza alemanes impulsan los valores financieros y colocan al Ibex 35 al frente de la remontada en Europa. El tándem formado por Grecia y Alemania ha resultado extrañamente alcista este miércoles. Mientras que el acuerdo para desbloquear un nuevo tramo del rescate heleno ha ayudado a mantener el tono comprador del mercado, los índices de confianza de la ‘locomotora europea’ han espoleado la remontada del Ibex 35 por encima de los 9.000 puntos.
Finalmente, el acuerdo entre Grecia y sus acreedores internacionales que el mercado daba por hecho en la jornada de ayer ha sido confirmado, por lo que los gestores de carteras se auguran un verano libre de la recurrente amenaza de la quebradiza situación del país balcánico. Atenas ha aceptado muchas de las reformas que hasta ahora se había resistido a aplicar y la Troika ha accedido a un nuevo desembolso. Mientras tanto, los índices Ifo de confianza en Alemania han batido las previsiones de los analistas y revalidan su puesto por encima de los 100 puntos que indican expansión económica.
A tenor de este panorama, el Ibex 35 acelera las tímidas ganancias de la apertura y alcanza la media sesión negociadora un 1,8% arriba en los 9.080 puntos. Al frente de la remontada se sitúan los bancos, que copan las posiciones alcistas del selectivo madrileño. Popular (+5,7%), CaixaBank (+4,5%), Banco Santander (+4,3%), BBVA (+3,9%) y el Sabadell (+3,4%) se colocan al frente de la tabla de revalorizaciones. Al otro extremo, Aena (-1%), Enagás (-0,8%) y Dia (-0,7%) echan el freno a los avances.
Por el resto de plazas europeas, el que mejor sigue el ritmo del Ibex 35 es el paneuropeo EuroStoxx 50, que gana un 1,5% hasta los 3.055 puntos debido al mayor peso que como en el caso del selectivo español tienen los valores bancarios. Un 1,3% arriba suma el DAX de Fráncfort, mientras que el Ftse MIB italiano y el CAC 40 parisino medran un 1% al ecuador de la sesión negociadora. El Ftse 100 londinense queda más rezagado con un 0,6% de subida.
La conclusión de las conversaciones con Grecia, que hace solo unas semanas apuntaban a un panorama muy distinto del conseguido se deja sentir también en el mercado secundario de deuda soberana europea. Los inversores rebajan sus exigencias de rentabilidad sobre los bonos españoles a diez años al 1,51% mientras que al ‘bund’ alemán le siguen pidiendo un 0,17%. Así, la prima de riesgo se suaviza hasta los 134 puntos básicos.
