La cotización de la compañía se veía favorecida por la caída en el precio del crudo después de que ayer la OPEP decidiese mantener la producción diaria en 30 millones de barriles diarios.
Las acciones de IAG escapaban del signo negativo que dominaba la mañana en la Bolsa española, con un avance de un 1,11% hasta alcanzar los 5,82 euros. A la misma hora, el Ibex 35 retrocedía un 0,53%. En lo que va de año, los títulos acumulan ya una revalorización superior a un 20%.
La cotización de la compañía que agrupa a British Airways e Iberia se veía favorecida por la brusca caída en el precio del petróleo después de que ayer la OPEP decidiese mantener la producción diaria de petróleo en 30 millones de barriles diarios.
Este anuncio llevó a que el precio del crudo cayera a mínimos de cuatro años, con el West Texas incluso llegando a situarse por debajo de los 70 dólares por barril. Al cierre del mercado, la caída fue de un 7,04% hasta los 68,50 dólares.
Arabia Saudí, el mayor productor mundial de ‘oro negro’, logró imponer ayer en la cumbre de la OPEP su decisión de no reducir el bombeo de sus pozos manteniendo intacto su objetivo de extraer 30 millones de barriles al día. Una opción que los analistas han entendido como un pulso ante el eventual cambio de fuerzas que supondría que EEUU impusiera el ritmo con sus nuevos métodos. Es así que desde el cártel petrolero se ha apuntado que si los precios siguen esta tendencia marcadamente bajista, la mitad de la producción estadounidense no convencional será poco rentable y las empresas responsables se verán obligadas a frenar su actividad.
Mientras que el coste de la extracción del petróleo convencional en Arabia Saudí y otros países de su entorno ronda los cinco dólares por barril, la obtención en EEUU de un tonel mediante técnicas de ‘fracking’ -la polémica técnica que consiste en inyectar agua a alta presión en la tierra con una mezcla química para romper la roca y liberar petróleo y gas- llega a suponer un gasto de entre 50 y 75 dólares, según los cálculos de los expertos.
A pesar de esta cadena de cifras, el seno de la poderosa OPEP está más dividido que nunca, pues naciones exportadoras como Venezuela, Libia y Nigeria reclamaban medidas para frenar las caídas dado que la mayor parte de su economía se basa en los ingresos por la venta de crudo, ya muy comprometidos en el umbral actual de unos 90 dólares por barril.
Pero la caída en el precio del petróleo no es la única noticia que tienen que celebrar los accionistas de IAG, después de que a principios de mes la compañía anunciase que pagará dividendo en 2015, con un payout inicial del 25%.
Durante la celebración de Día de los Mercados de Capitales, celebrado en Londres, IAG señaló que “la compañía ha hecho progresos significativos en 2014 y seguimos confiando en alcanzar los objetivos financieros establecidos para 2015, lo que permitiría introducir un reparto de dividendos”. En concreto, “prevemos anunciar en 2015 el pago de un dividendo como el primer paso en nuestro plan para introducir un reparto de dividendos sostenible”.
