El fondo de reserva tiene como finalidad hacer frente a posibles necesidades de recursos propios de los bancos a los que las cajas traspasaron los negocios. La Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) ha solicitado al Banco de España reducir la cuantía del fondo de reserva que deberán dotar las nuevas fundaciones bancarias, una petición que se enmarca dentro de las alegaciones que la patronal ha presentado al proyecto de circular sobre cajas de ahorros y fundaciones bancarias del supervisor.
La constitución del fondo de reserva tiene como finalidad hacer frente a posibles necesidades de recursos propios de los bancos a los que se traspasaron los negocios. En concreto, la circular establece que el importe mínimo objetivo del fondo de reserva “será el que resulte de aplicar un porcentaje sobre el total de los activos ponderados por riesgo del subgrupo consolidable encabezado por la entidad de crédito participada, o si existiera sociedad interpuesta entre la fundación bancaria y la entidad de crédito, del subgrupo consolidado prudencial de la citada sociedad”.
Las entidades afectadas pretenden con sus alegaciones que la cuantía obtenida de este cálculo sea la menor posible. En este sentido, las cajas consideran que los bancos que no tienen que dotar este fondo “juegan con ventaja”, señala Europa Press, que cita fuentes del sector.
Las alegaciones también se han centrado en la “acción concertada”, una cuestión que afecta fundamentalmente a las cajas vascas y que define la manera de actuar de fundaciones bancarias con participaciones accionariales en el mismo banco.
Esta petición va en línea de las solicitudes que hizo en su día BBK, propietaria del 57% de Kutxabank. La entidad confía en que, a través del diálogo con el Banco de España, se subsanen las “disfunciones” que pudieran eventualmente surgir de la aplicación de la circular y se pueda preservar la viabilidad, tanto de la fundación bancaria como la de Kutxabank.
A finales de octubre el Banco de España sacó a consulta pública el proyecto de circular y prolongó hasta el 18 de noviembre el plazo para presentar alegaciones al texto. El organismo que dirige Luis María Linde estudiará ahora las peticiones de las cajas y posteriormente pasará al Consejo de Estado con la intención de que la circular esté lista antes de final de año.
