El homenaje a Miguel Ángel Blanco ha abierto un nuevo debate sobre estos actos a víctimas del terrorismo. ¿Deben hacerse a todas? ¿Se está discriminando al resto de afectados? Por el momento, una víctima del atentado de ETA de Hipercor cargó con dureza la doble vara de medir de Mariano Rajoy. Y este viernes la Agrupación Reformista de Policías ha reclamado a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, que no se celebren homenajes con nombres propios.
En un escrito a Pastor, el sindicato de policías nacionales creado en octubre de 2016 ha apuntado la necesidad de desindividualizar los actos homenaje. El motivo: evitar que nadie que haya padecido sus consecuencias “quede relegado al ostracismo” y su caso “no tenga el reconocimiento merecido”, tal y como ha recogido la Agencia EFE.
A pesar de esta petición, la Agrupación Reformista de Policías ha matizado que la celebración de actos a todas las víctimas no tiene por qué restar importancia a los casos excepcionales y simbólicos, como el de Miguel Ángel Blanco. No obstante, en su escrito a la presidenta de la Cámara Baja han recordado que al igual que hubo asesinatos dentro de la clase política y la sociedad civil, no merece ser descuidada tampoco la memoria de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y de las fuerzas armadas.
Respecto a toda la polémica que ha rodeado al 20 aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, el sindicato ha lamentado la “polarización” que se ha vivido en los últimos días. Y es que, según han apuntado, no se debe acusar a unos u otros de ser más o menos considerados con la memoria de los fallecidos por ser de una militancia u otra, ya que lo importante para crear una sociedad unida y fuerte contra el terror es no olvidar a ninguna víctima.
