La cantante Rozalén destinará todos los beneficios que genere la canción ‘Aves enjauladas’ a una red de pisos de acogida en España para familias, mujeres e infancia en riesgo de exclusión social, apoyados por Entreculturas, según ha informado la ONG.
Ante la situación que está viviendo el país como consecuencia del coronavirus, la artista y activista ha lamentado que «algunos lo van a pasar peor».
Entre esos colectivos especialmente sensibles a la crisis del coronavirus se encuentran familias en situación de vulnerabilidad, a las que Rozalén apoyará a través de Entreculturas con este nuevo tema benéfico.
«Un tema solidario, optimista, en el que pone en valor aprender de lo que estamos viviendo el mensaje es que tenemos que vivir lo que nos ha tocado día a día, aprendiendo de esta para volver con más fuerza», ha señalado Rozalén.
‘Aves enjauladas’ se enmarca en la historia de colaboración de Rozalén y la intérprete de lengua de signos Beatriz Romero, con Entreculturas, a favor de las niñas y mujeres víctimas de violencia, las personas refugiadas, los proyectos de cooperación internacional que han podido visitar durante los últimos dos años en Guatemala y en Chad; y, ahora, con los colectivos más vulnerables de España en el contexto de la emergencia de la Covid-19.
«La canción de Rozalén para Entreculturas es un regalo en mitad de la pandemia, y nos permite, además, brindar un homenaje y tener presentes a las personas más vulnerables y a la fragilidad que supone vivir esta crisis en condiciones de exclusión, por eso este apoyo será a favor de las mujeres en situación de vulnerabilidad atendidas por el Servicio Jesuita a Migrantes en Valencia», indica Daniel Villanueva, Vicepresidente Ejecutivo de Entreculturas.
Cada reproducción en Youtube, Spotify y otras plataformas permitirá a Entreculturas apoyar la red de pisos de acogida del Servicio Jesuita a Migrantes-España (SJM-E) para familias, mujeres e infancia en situación de vulnerabilidad y, en concreto, a la red de cuatro pisos situada en Valencia que forma parte del proyecto Hospitalidad. «Los beneficios se destinarán a sustentar las necesidades básicas de manutención (alimentación, vivienda, medicinas), servicios básicos (agua, luz, gas, internet), material escolar de los más pequeños y transporte. Además, se pretende favorecer la autonomía y emancipación de las personas acogidas a través de espacios de apoyo mutuo con otras mujeres y de atención psicológica especializada», explica María del Carmen de la Fuente, Coordinadora del SJM. Durante esta crisis del coronavirus los pisos se mantienen en régimen de confinamiento y la mayor necesidad es el apoyo para la manutención y los gastos corrientes. En cuanto esta situación termine necesitarán apoyo para retomar los cursos de inserción socio laboral.
Rozalén canta sobre las ganas de volar y hace una llamada a que «cuando se quemen las jaulas y vuelva a levantarse el telón» recordemos siempre las lecciones aprendidas durante el confinamiento para construir colectivamente un mundo mejor.
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