Los especuladores han contado este verano con un aliado inesperado para hacer negocio en Bolsa: Ben Bernanke. La falta de definición de la Reserva Federal de EEUU que él preside a la hora de determinar cuándo comenzará a retirar estímulos económicos ha espoleado la habitual volatilidad estival de los mercados. Negocio en bandeja de plata para las posiciones especulativas.
Después de un enérgico ‘rally’ en la primera mitad del mes de agosto, esta semana ha estado marcada por una fuerte corrección de precios a escala global. En ambos casos, el motivo de fondo para una y otra tendencia ha tenido su origen en los cuarteles generales de la Fed. Primero, compras al calor de una arenga del propio Bernanke en defensa de la conveniencia de retirar los estímulos especiales de manera ordenada según evolucionase la que sigue siendo la mayor economía del mundo. Luego, ventas al frío de la espera de las actas de la última reunión de trabajo del organismo monetario que, a la postre, no han aportado señales claras sobre sus próximos pasos a seguir.
Ante este escenario, el índice VIX que mide la volatilidad de los mercados ha marcado máximo tras máximo en los últimos días. Los bruscos cambios de tendencia sufridos por los parqués internacionales en ambas orillas del Atlántico y también en Asia han facilitado sobremanera la consecución de ganancias a través de las apuestas más especulativas como el préstamo de acciones y las posiciones cortas o la compraventa de acciones a través de robots en el más corto plazo, lo que se conoce en jerga como ‘trading de alta frecuencia’ o HFT, por sus siglas en inglés.
Los analistas explican que los bajos volúmenes de negociación propios de los meses de verano provocan que los movimientos tanto al alza como a la baja se amplifiquen. Así, las dudas alimentadas por la Fed han llevado al indicador VIX a marcar su máximo en dos meses en los 15,13 puntos. Y las turbulencias más abultadas podrían estar aún por venir, según vaticinan algunos gestores de carteras.
La recogida de beneficios por la que podrían optar buena parte de los inversores en la recta final del mes augura un nuevo festín especulativo. Y es que, según los expertos, se espera que sean muchos los oportunistas que opten por asegurar ganancias antes de que Bernanke y sus compañeros pudieran comenzar con los recortes en septiembre y provocar un nuevo descalabro en los parqués internacionales alimentando aún más la opción del mercado por las prácticas más especulativas de inversión.
