CaixaBank obtuvo en los nueve primeros meses del año un beneficio atribuido de 1.768 millones de euros, un 18,8% más respecto al mismo periodo de 2017, según ha anunciado hoy la entidad, que ha achacado este incremento a la fortaleza de los ingresos core, la mayor aportación de BPI, la reducción de las dotaciones y la contención de costes.
Los ingresos core del negocio (margen de intereses, comisiones, ingresos del negocio de seguros, puesta en equivalencia de SegurCaixa Adeslas y las participaciones de BPI Bancaseguros) aumentaron un 4,5% hasta los 6.183 millones, y el total de los ingresos –el margen bruto- un 6,3% hasta los 6.901 millones de euros. Los gastos de administración y amortización recurrentes crecieron un 3,7%.
La contribución a resultados del negocio de BPI en Portugal ascendió a 168 millones (59 millones en los nueve primeros meses de 2017). Si se tiene en cuenta la aportación de las participadas de BPI, la contribución total del banco portugués fue de 399 millones.
La rentabilidad del grupo (ROTE) mejoró hasta el 9,4% –en línea con el objetivo del Plan Estratégico para 2018 del 9%-11%–, mientras que el ROTE recurrente del negocio bancario y asegurador alcanzó el 12,2%, con un resultado de 1.913 millones.
El margen de intereses de la entidad que preside Jordi Gual alcanzó los 3.671 millones, un incremento de un 3,4%. Los ingresos por comisiones se situaron en 1.938 millones, un aumento del 3,8% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Por un lado, bajaron un 4% las comisiones bancarias, de valores y otros; por otro, se mantuvo la tendencia de crecimiento de las comisiones de los fondos de inversión (+16,3%), planes de pensiones (+7,4%) y comercialización de seguros (+23,4%) por el incremento sostenido de la actividad comercial y del patrimonio gestionado.
El negocio de las participaciones contribuyó al grupo con un resultado de 69 millones, incluyendo el resultado negativo de 453 millones derivado del acuerdo de venta de la participación en Repsol, no los resultados de las participadas incluidas en el negocio bancario y de seguros.
La ratio de morosidad de CaixaBank se redujo hasta el 5,1%, frente al 6,4% de hace un año. En cuanto a la solvencia, la entidad alcanzó una ratio Common Equity Tier 1 (CET1) fully loaded del 11,4% a 30 de septiembre, en línea con el rango fijado en el Plan Estratégico 2015-2018 (11%-12%).
