No solo gas ruso: Bruselas plantea también topes para el precio de la eólica, carbón y nuclear

Crisis energética

No solo gas ruso: Bruselas plantea también topes para el precio de la eólica, carbón y nuclear

El Ejecutivo comunitario plantea tasas a las energéticas y objetivos obligatorios de reducción de consumo eléctrico en horas punta.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hablando por teléfono

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha presentado este miércoles su propuesta a los gobiernos europeos para reducir el consumo energético y contener el alza de los precios que incluye una tasa de solidaridad a las grandes energéticas europeas que se redirigirá a empresas y hogares vulnerables. También un tope a los precios del gas ruso. Pero, además, el Ejecutivo comunitario planea en un límite a la electricidad generada por otras vías, como parte de los esfuerzos para sofocar la crisis energética.

De acuerdo con Financial Times, Bruselas incluye en su borrador de propuestas un límite en el precio de la electricidad de productores de parques eólicos, centrales nucleares y de carbón -fuentes condicionadas por el alto precio del gas- a 200 euros el MWh.

El actual precio al contado de la electricidad en Alemania supera los 450 euros el MWh. En España, la media de agosto se situó en los 307,80 euros.

Los precios mayoristas de la electricidad se han disparado porque están vinculados al precio del gas -que es aproximadamente diez veces más alto de la media de la última década-, independientemente de que la energía eléctrica se produzca con gas o por otros medios.

Este tope imitaría “los resultados del mercado que cabría esperar si las cadenas de suministro mundiales funcionaran con normalidad y no estuvieran sujetas a la militarización de la energía mediante interrupciones del suministro de gas”, según el documento de la Comisión visto por el diario británico.

Todo lo que las empresas energéticas ganen por encima de ese tope será recaudado por los gobiernos y devuelto a los consumidores como consideren oportuno, se apunta en el borrador de propuesta, que se debatirá este viernes en la reunión extraordinaria de ministros de Energía de la UE.

Europa ha visto cómo se reduce el gas natural procedente de Rusia, hasta ahora su mayor proveedor, en respuesta al apoyo occidental a Ucrania. El Kremlin advirtió el lunes que los suministros a través del crítico gasoducto Nord Stream 1, el mayor entre Europa y Rusia, se reducirían hasta que se levantaran las sanciones occidentales.

Las industrias europeas han avisado de que se enfrentan a una “amenaza existencial” a menos que los responsables políticos intervengan para aliviar los costes de la energía.

«Nos enfrentamos a una situación extraordinaria porque Rusia no es un proveedor digno de confianza y manipula los mercados energéticos», ha dicho Von der Leyen en una comparecencia ante la prensa en Bruselas para exponer las líneas maestras de su propuesta.

La jefa del Ejecutivo comunitario ha insistido en que el régimen de Vladimir Putin usa la energía para «chantajear» a los europeos y ha defendido la «unidad» y «solidaridad» con la que los Estados miembro han hecho frente a la situación desde el inicio de la invasión de Ucrania hace ya seis meses.

REDUCCIÓN DEL CONSUMO EN HORAS PUNTA

Otra de las claves de la propuesta de Bruselas apunta a contener los picos que determinan el precio de la electricidad, para lo que Von der Leyen ha pedido un objetivo obligatorio de reducción del consumo eléctrico en horas punta. «Necesitamos una reducción inteligente de la demanda», ha dicho la política alemana, tras evocar la «escasez energética mundial».

Este objetivo obligatorio de reducción de consumo de electricidad en las horas de mayor consumo podría alcanzar el 5%.

Los países europeos están en general a favor de planes para fomentar la reducción de la demanda, pero están divididos acerca de cómo abordar la espiral de precios.

Algunos, como España e Italia, han pedido que se separen los mercados del gas y la electricidad, mientras que otros están a favor de limitar los precios del gas.

Más información