El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso.
El Gobierno se prepara ya para un adelanto electoral después de que el Congreso de los Diputados haya tumbado este miércoles su proyecto de Presupuestos para 2019. Y lo ha hecho con los votos de PP, Ciudadanos, ERC y PDeCAT, entre otros. Esta derrota empuja a Pedro Sánchez a la cita en las urnas. El propio jefe del Ejecutivo anunciará este viernes, tras el Consejo de Ministros, la fecha de las próximas generales.
Todo apunta a que el día elegido por Sánchez será el 28 de abril. Por lo menos esto es lo que han transmitido estos últimos días dirigentes del Gobierno y del PSOE en los pasillos del Congreso durante el debate sobre las enmiendas a la totalidad. “Nada del 14, el 28 de abril”, afirmaban desde el entorno de Sánchez. Y es que nadie quiere esperar al ‘superdomingo’ electoral del 26 de mayo ni a después del verano, que eran otras de las opciones que sonaban en las últimas semanas. Sin embargo, aún habrá que esperar a ver lo que dice el jefe del Ejecutivo.
Por el momento Sánchez guarda absoluto silencio sobre este posible adelanto electoral y ha dado la callada por respuesta ante las preguntas de los medios de comunicación esta mañana en la Cámara. Él es el único que puede tomar esta decisión. Nadie más. Y así lo remarcan sus propios ministros, que no quieren saber nada de esta cuestión.
A la espera del viernes lo que parece que tienen claro algunos socialistas es que esta derrota parlamentaria ha sentenciado la legislatura y no hay que retrasar más su fin. “No se puede gobernar ya”, explicaban en declaraciones a EL BOLETIN diputados del PSOE. La situación es “insostenible”, sostenían otros. Según destacados dirigentes, la ruptura con los independentistas es total y “¿quién te garantiza que te apoyarán cuando traigas algo al Congreso?”. Por ello, defienden que hay que ir a las urnas.
En caso de que Sánchez apueste por el domingo 28 de abril para celebrar las generales el decreto de convocatoria tendrá que publicarse y entrar en vigor el 5 de marzo. Durante ese tiempo el Ejecutivo va a tratar de sacar adelante el mayor número de decretos, aunque admite que teme que el PP no se lo ponga fácil e intente poner todos los obstáculos posibles.
El rey Felipe VI debe firmar el mencionado decreto de disolución. El monarca ha emprendido este miércoles su viaje de Estado a Marruecos, aunque el viernes ya se encontrará en España.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que el 28 de abril es un “día estupendo” para que se celebren las generales. “Un día dedicado a las elecciones siempre es un día bueno”, ha señalado el socialista manchego, que se había mostrado muy crítico con la posibilidad de que esta cita en las urnas coincidiera con los comicios autonómicos, municipales y europeos del 26 de mayo.
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