Esperanza Aguirre organiza un encuentro de mujeres del PP en el que la ‘lideresa’ y Ana Botella se ponen como ejemplo de que el partido no es machista. El PP ha montado una especie de ‘mitin feminista’ en Madrid para tratar de apagar el incendio electoral que han provocado las las acusaciones de machismo que ha recibido su cabeza de lista Miguel Arias Cañete, por las polémicas declaraciones sobre las mujeres, que realizó tras el debate con la candidata del PSOE, Elena Valenciano.
Para apoyar a su candidato, el PP de Madrid, con Esperanza Aguirre y Ana Botella a la cabeza, ha organizado un encuentro con más de un centenar de mujeres que ostentan cargos electos en la formación popular en la capital y en la comunidad autónoma y en la capital, en el que también han participado las eurocandidatas número 3 y 5 en las listas del PP para los comicios europeos, Teresa Jiménez Becerril y Pilar del Castillo.
En este mitin, celebrado en los Jardines de Cecilio Rodríguez del Retiro, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha defendido que “en ningún lugar pone que para ser mujer haya que ser de izquierdas» y que las mujeres del PP han llegado a puestos de alta responsabilidad “sin cuotas ni por glamour, sino por su valía”, tal y como recoge Europa Press.
Botella ha criticado al PSOE que en campaña “hablen de todo menos de su incapacidad para gobernar”, con sus intentos de “embarrar el debate” de la mano de la «frase desafortunada” de Miguel Arias Cañete.
La alcaldesa ha opinado que es mucho peor que una frase no demasiado acertada una “actuación equivocada”, como la del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, cuando decidió destituir como ministro de Cultura a César Antonio Molina por Ángeles González-Sinde, que “tenía más glamour”. Y ha roro una lanza por el candidato de su partido para las elecciones del domingo. “Apoyo públicamente a Miguel Arias Cañete, que es un valor seguro para defender los intereses de España”, además de una “muy buena persona”.
Botella, por otro lado, ha confesado que se siente “asombrada” después de que el primer ministro francés, François Hollande, declarara que la izquierda había luchado por la defensa de la mujer en contra de lo que hizo la derecha, lo que le ha llevado a recordar que cuando Clara Campoamor luchó para conseguir el voto femenino se encontró con la oposición de la izquierda. “No me hizo falta ser de izquierdas para proponerme metas y conseguir mis objetivos», ha remachado.
“La izquierda no ha conseguido la liberación de la mujer. Nosotros hemos trabajado mucho por romper ese techo de cristal y así se consiguió que la presidencia del Senado o que por primera vez una mujer presidiera una comunidad autónoma con un gobierno del PP”, ha destacado. Esto lo ha ligado a que no hay “medida más progresista” que la creación de empleo porque “la verdadera independencia no existe sin la económica». Todo ello lo ha ligado a valores en los que cree el PP como el «mérito, la capacidad, el trabajo y el afán de superación”.
