Aunque Rajoy se ha comprometido a cerrar la legislatura con menos parados que la inició, las previsiones de los expertos no confirman esta posibilidad. Aunque Rajoy se ha comprometido a cerrar la legislatura con menos parados que la inició, las previsiones de los expertos no confirman esta posibilidad.
Podría ser. Pero no apuesten por ello. Tal vez Rajoy consiga cerrar la legislatura con menos parados que cuando comenzó. Sin embargo, en ese caso, sería difícil que el presidente reivindicara el dato como un éxito.
Al menos, si se cumplen las previsiones de los expertos, y las del propio Gobierno, que sitúan la tasa de paro por encima del 20%, por lo menos hasta 2016. O sea que, en valor absoluto, la cifra seguirá por encima o muy cerca de los 5 millones de parados.
En esa línea están las previsiones publicadas por la Comisión Europea el pasado 5 de noviembre. Según los cálculos de Bruselas, la tasa de paro se situará en el 26,6% y sólo se reducirá dos décimas el año que viene hasta el 26, 4%, para situarse en el 25,3% a finales de 2015.
Y esta es la previsión más optimista entre los organismos internacionales. El FMI aún lo ve más negro, por lo menos este año y el que viene, cuando la tasa de paro se situará en el 26,9% y el 26,7%, respectivamente.
Entre los especialistas españoles, las estimaciones son algo más favorables, pero incluso así, no bajan del 25% de promedio. Con un problema añadido. Nadie se arriesga todavía a ponerle fecha a un crecimiento económico estable y superior al 2% anual que es el mínimo estimado para que la creación de empleo empiece a notarse realmente en las cifras.
En definitiva, la posibilidad de que a finales de esta legislatura, como propone el presidente del Gobierno, la tasa de paro se sitúe por debajo del 21,6% en que se encontraba cuando Rajoy llegó al poder, parecen cuando menos remotas.
