Arturo Fernández, vicepresidente de la CEOE, salió hoy al rescate de su presidente, Juan Rosell, que ha provocado una gran polémica por pedir que se retiren a” los contratos indefinidos algunos de sus «privilegios» incrementándolos para los temporales nuevos, lo que él mismo calificó de “experimento”.
Fernández cree que Rosell no ha querido decir es que los indefinidos tengan privilegios, sino que lo que quiso decir es “que en un momento donde hay muchos parados y 47 modalidades de contratación y solo se utilizan siete habría que dejar sólo las modalidades más fáciles y buscar fórmulas de hiperflexibilidad: dar muchas facilidades para contratar”.
El vicepresidente primero de la patronal reconoce que Rosell utilizó esa palabra pero que no se refería a que sea un privilegiado quien tenga un contrato fijo: “Un contrato indefinido no es un privilegiado es un derecho que tiene el trabajador y que contempla la Constitución”, sentenció Arturo Fernández.
Además, el también presidente de la CEIM y de la Cámara de Comercio de Madrid rompió una lanza a favor del presidente de la patronal, cuyas propuestas han desatado una gran polémica en este mes de agosto y aseguró que “Rosell está poniendo al día a la CEOE para colocarla entre las patronales más modernas de Europa haciendo grandes cambios a la modernización.
Arturo Fernández admitió que en CEOE: “Estamos un poco anquilosados” por lo que defendió la gestión de Rosell en el convencimiento de que “las organizaciones empresariales tienen que ser tan competitivas como las empresas y hay que dirigirlas como si fueran empresas”.
