El presidente de la CECA (Confederación Española de Cajas de Ahorros), Juan Ramón Quintás, han logrado lo que hasta hace bien poco no parecía posible: que los sindicatos y la patronal estén de acuerdo en algo.
Las polémicas declaraciones del presidente de las cajas, que aseguró que o había progresos en el dialogo social o se tendrían que convocar elecciones anticipadas, no han pasado desapercibidas para nadie. Así, y en un hecho en apariencia imposible, tanto el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, como el secretario general de UGT, Cándido Méndez, coincidieron en afirmar que Quintás “se ha pasado de frenada” en sus declaraciones.
Así, Díaz Ferrán rechazó las críticas de Quintás e hizo hincapié la voluntad de ambas partes del Dialogo Social de sentarse a negociar y lograr avances en las conversaciones, dejando solo a Quintás por el lado de los empresarios. Fue Méndez, que también apostó por llegar a un acuerdo en la mesa del dialogo social, quien obligó al presidente de la CECA a recordar que “las Cajas de Ahorros han sido corresponsables de la crisis económica”, por lo que cuestionó su legitimidad para exigir responsabilidades.
Quién sí ha acogido con “gran alegría” las declaraciones de Quintás ha sido el PP. Tanto Rajoy como Aznar, de gira en Sudamérica, se mostraron de acuerdo con lo dicho por el representante de las Cajas. Así, Rajoy dijo que esta opinión era “la de muchos españoles”, mientras que Aznar se apuntó al carro en la petición de elecciones anticipadas.
Sobre esto, el Gobierno tiene las ideas claras. El PSOE agotará su mandato, vayan las cosas bien, mal o peor, según Antonio Alonso.
