El Gobierno asturiano ha decidido poner a trabajar a los médicos de la Sanidad pública los sábados para cumplir con el aumento de la jornada laboral a los funcionarios decretado por Mariano Rajoy. De esta forma, dará a elegir entre trabajar cuatro horas cada dos semanas o 2,5 horas todos los sábados. La medida ya ha puesto en pie de guerra al sector.
El presidente del Ejecutivo asturiano, el socialista Javier Fernández, va camino de meterse en un conflicto con la comunidad médica similar al que tiene el popular Ignacio González en Madrid. El Servicio de Salud del Principado (Sespa) ha preparado una ampliación de horarios que negociará mañana con los sindicatos de la Mesa Sectorial de Sanidad, y que recoge una nueva norma: los doctores tendrán que trabajar los sábados.
La medida, según recoge El Correo, permite dos opciones: trabajar uno de cada dos sábados, en turnos matinales de cuatro horas o, en su defecto, todos los sábados pero sólo 2,5 horas. Una decisión que no ha gustado nada al sector, ya que los facultativos de la Sanidad pública dejaron de trabajar en sábado hace siete años, cuando el Principado acordó la reducción de jornada y pasó a las 35 horas semanales.
Además, aunque la pretensión del Sespa es que los médicos devuelvan horas del descanso después de la guardia, para lo que ha fijado un tope de 9 horas al mes, el nuevo proyecto de jornada no garantiza ni la exención de guardia para mayores de 55 años, cuya autorización queda en manos de este organismo, ni tampoco la realización de módulos compensatorios y retribuidos, como hasta ahora.
El nuevo decreto de regulación de jornada en el ámbito de centros e instituciones sanitarias del Sespa ha sido recibido de forma desigual por los sindicatos. Mientras que para CCOO y Sicepa-Usipa se trata de “una propuesta aún lejana para cerrar un acuerdo”, el de Enfermería (Satse) prefiere esperar a que se pronuncie su comité ejecutivo. En cualquier caso, la secretaria autonómica del Satse, Margot Marqués, ha dicho tener “muchas expectativas” sobre esta nueva propuesta, y se ha mostrado confiada de que “en las mesas de negociaciones, en cuantas reuniones haga falta, seremos capaces de llegar a acuerdos”.
