La presión sobre Carlos Dívar aumenta por minutos. Un día antes de que se celebre un pleno en el CGPJ que analizará su futuro tras la polémica por sus viajes a Marbella, 17 jueces decanos han firmado un documento en el que muestran el “sentimiento de impotencia, vergüenza y tristeza” que les genera que Dívar siga al frente de la Justicia española.
“Estar a la altura de las circunstancias”. Esto es lo único que piden a Carlos Dívar los 17 jueces decanos ante “la situación de desprestigio que amenaza a la carrera judicial” que ha provocado la polémica sobre los viajes del presidente del Consejo General del Poder Judicial cargados, presuntamente y según los denunciantes, a las arcas públicas.
Este caso, según estos jueces decanos, no ha hecho más que generar “un sentimiento de impotencia, vergüenza y tristeza en el colectivo judicial, es gravemente perjudicial para su imagen y afecta al funcionamiento del Estado de Derecho”.
Este colectivo no es el único que ha aumentado la presión en torno a Carlos Dívar. La Asociación Profesional de la Magistratura (APM), que integra a los jueces conservadores, ha asegurado que acogería con «desahogo» que el presidente del CGPJ presentara voluntariamente su dimisión, según recoge Europa Press.
Más críticos han sido desde Foro Judicial Independiente que ha exigido la dimisión de Dívar y del magistrado que denunció los mencionados viajes, José Manuel Gómez Benítez. Esta asociación judicial carga contra ambos. Al máximo representante del órgano, le recrimina su “silencio”, y a Gómez Benítez que presentara una denuncia de un modo «absolutamente tendencioso».
Frente a esta polémica, el Gobierno se ha mantenido al margen. La vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, tras el Consejo de Ministros, ha recordado el principio de separación de poderes. Por todo ello, se ha limitado a insistir en que respeta la resolución judicial, que estima que no hay acto delictivo. “No vamos a entrar en lo que dicen unos y otros”, ha remarcado Santamaría.
