Gran parte de los socialistas europeos (S&D), menos el PSOE, rechazó la propuesta de que Cañete diese explicaciones en el Parlamento Europeo. Lo hará en una comisión privada. “Esconderse tras el secreto de una comisión parlamentaria no sólo no disipará las dudas sino que las incrementará sin límite”. Con estas palabras, el PSOE Europeo, a través de su eurodiputada Iratxe García, lanza un órdago al comisario de Energía y Acción Climática, Miguel Arias Cañete: su defensa en la Eurocámara por su presunta implicación en el caso Acuamed y por la presencia de su mujer en los papeles de Panamá ha de ser pública y no privada como está prevista.
Un ‘reto’ a Arias Cañete lanzado en una carta donde le solicitan que “reconsidere su opinión” de no plantarse ante los eurodiputados para dar las explicaciones pertinentes sobre los últimos escándalos que han salpicado al popular. La comparecencia del próximo martes será en privado y ante la Comisión de Asuntos Jurídicos de la Eurocámara, tal y como planteó el grupo parlamentario en el que está el PSOE.
Pese a la exigencia que reclaman los socialistas españoles, fue el líder de los socialistas europeos, Gianni Pittela, el que presentó la propuesta de llevar a Arias Cañete ante la Comisión de Asuntos Jurídicos de la Eurocámara. De hecho, la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D) días antes decantó la balanza en contra de la propuesta de Podemos de cambiar el orden del día para que el comisario popular diese explicaciones en público ante los eurodiputados. No obstante, Podemos sí recibió algunos ‘síes’ de S&D: ocho de los 14 políticos que tiene el PSOE en el Parlamento europeo votaron a favor; los otros seis no estuvieron presentes en la votación.
La justificación que realizaron los socialistas europeos llegó de la mano de la eurodiputada belga Kathleen van Brempt, que afirmó que el voto en contra de su grupo se debía a que era “necesario más tiempo para analizar esta cuestión en profundidad”, no porque no creamos que pueda ser grave, o que hace falta transparencia”.
“No es a un grupo de diputados y diputadas a quien tiene que aclarar las graves noticias que le afectan, sino al conjunto de la sociedad europea que se hace muchas preguntas y se merece escuchar sus respuestas”, asevera la socialista García. Aun así, Arias Cañete ya manifestó su estrategia: únicamente irá a donde le llamen. Y esa comparecencia es la del 13 de julio, aunque sea secreta.
“Donde me llamen iré, con total transparencia y voluntad de colaboración”, aseguró el comisario de Energía y Acción Climática hace apenas unas semanas en un encuentro que realizó en España. Una transparencia y una colaboración que es lo que echan en falta los socialistas españoles entendiendo que los europeos se merecen “una comparecencia transparente, profunda y con contundencia”.
Por ello, el órdago está lanzado, aunque el tiempo de decisión se estrecha a pocos días de la esperada intervención privada del popular. “Usted puede solicitar que sea en abierto y, sin duda, los miembros del Parlamento Europeo no sólo se lo facilitaremos sino que se lo agradeceremos”, le recuerdan desde el PSOE, a pesar de que su grupo parlamentario votase en contra a la propuesta de la formación morada.
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