La limpieza es uno de los emblemas de la gestión de la capital y Ahora Madrid sigue sin conseguir que los contratos de Ana Botella den un buen servicio. La limpieza ya es ‘asunto de Estado’ en la capital. En el nuevo equipo de gobierno nadie niega la evidente suciedad de Madrid; más bien al contrario. La concejala de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, ha enviado una ‘carta abierta’ a los madrileños para asegurar que conseguir que Madrid vuelva a estar limpio es una prioridad “máxima” del equipo de Manuela Carmena. En mitad de una extensa explicación del problema en el blog del consistorio, Sabanés se ha comprometido a “auditar el contrato, porque del profundo deterioro en estos dos años hay responsabilidades y responsables”.
Con esos dos años la edil se refiere al tiempo transcurrido desde que se firmó el contrato integral de limpieza en Madrid, un “cambio de filosofía” en el servicio ideado por la exalcaldesa Ana Botella cuya justificación era el ahorro. “Nada más firmar el contrato en 2013, tres de las empresas presentaron un ERE para despedir a unos mil trabajadores. Su justificación era que con el dinero con el que (se) habían firmado los contratos no podían mantener el 100% del personal”, recuerda Sabanés. Aquel ERE se convirtió en ERTE (Expediente de Regulación de Empleo con carácter temporal), por lo que una parte de la plantilla deja de trabajar y percibir sueldo durante una parte del año.
Llegados a este punto, el consistorio quiere admitir que no “hay fórmulas mágicas”: “Tenemos menos efectivos en las calles. Y las calles se limpian con maquinaria y personas”, reconoce Sabanés. “Las empresas concesionarias accedieron a ser proveedores a través de un concurso público al que ellas mismas ofertaron, marcando ellas las cantidades por las que aseguraban dar el servicio óptimo”, sostiene la concejal, que en la misma carta se muestra sorprendida de algunos de los puntos de los contratos, como que sean “servicios en base a sesenta y ocho indicadores de calidad y en los que no se establece una dotación mínima para prestarlos”.
“¿Te parece increíble? A mí también”, prosigue. La concejal encargada de la la limpieza asegura en este punto que su trabajo es solucionar la situación, no esconderse en la “herencia recibida”. Por ello, prioriza garantizar la limpieza, algo que no se ha conseguido con las 25 actuaciones de urgencia y de refuerzo por zonas durante el verano. “Para ello lo más lo más urgente es contar con el número suficiente de trabajadoras y trabajadores, y que, de entre ellos, los más de mil afectados por los expedientes temporales trabajen a tiempo completo”.
Pero, según Sabanés, no es suficiente: plantea la necesidad de señalar a los responsables de unos contratos firmados hasta 2021 y no descarta recurrir a la opción de la remunicipalizar el servicio. “Está por demostrar que la gestión privada sea más eficiente y ahorre recursos a los gobiernos tanto municipales, como autonómicos o estatales. En el caso que nos ocupa, un servicio privatizado como la limpieza está dando grandes problemas y generando una gran insatisfacción con sus resultados”, explica Sabanés.
